Encontrarás dragones

La acabo de ver en un pase previo al gran estreno. Me han gustado tres aspectos, a la vez que le veo un fallo.
El primer acierto es el tema central: la importancia de saber perdonar para no enquistarse en el resentimiento. Es algo de hondo calado y está muy bien tratado. Se agradece una peli que te haga reflexionar, te ayude a reconocer los "dragones" que hay en ti mismo, y te espolee a superarte en algo tan crucial.
El segundo acierto es el trato que hace de "nuestra" guerra. Toda una lección de memoria histórica que nos viene de un inglés. Es la primera vez que veo una película sobre la guerra civil que no me echa para atrás, que no insulta mi inteligencia con demagogias ideológicas. En definitiva, una peli aceptable para todos, que puede ayudar a que por fin dejen de existir esas "dos Españas".
El tercer acierto es que, ateniéndose a rigurosos datos históricos (coincide con lo mucho que he leído al respecto), Roland Joffé (un judío agnóstico) hace justicia a los orígenes de San Josemaría y del Opus Dei. Ya era hora de que se desagraviase con la verdad al que es quizá el español universal del siglo XX más vilipendiado, especialmente en su propio país. ¡Gran actuación de Charlie Cox!
No le doy un 10 porque he detectado un fallo de guión (véase el "spoiler"). Lo demás me ha parecido excelente: los actores, la banda sonora, la ambientación histórica, la fotografía, etc.

Mala, mala..... lo que se dice mala.
El genial Joffé debe atravesar una fuerte crisis económica para aceptar un encargo tan insustancial y propagandístico como este. De los 37 millones que ha costado le habrán pagado treinta y seis. No salgo de mi asombro.
Lo que es aún peor es la campaña propagandística que se ha realizado en los medios y en la red en pro de esta película. Una vergüenza, parece Zapatero negando la crisis.

"Encontrarás dragones", más que una película destinada a la gran pantalla, debería estar destinada a esas tardes de Semana Santa en las que hay poco o nada que hacer. En general la película carece de ritmo, ya que a los veinte minutos ya se puede predecir el resto del desarrollo. Los diálogos son poco menos que infantiles y facilones (con impensables respuestas casi proféticas por parte de algunos personajes) destinados en todo momento a glorificar a la Obra. Resulta prácticamente arcaico y digno del calificativo de "rabieta histórica" que los republicanos, anarquistas, comunistas, etc, sean tratados como asesinos despiadados en serie incapaces de mostrar ningún sentimiento digno de equipararse a la "santidad" de Escrivá. Sabemos que la Guerra Civil es un episodio aún sangrante y polémico de nuestra historia, pero de todo hay en la viña del Señor. Ni la República fue la panacea ni la Iglesia la salvadora y justa que esta película nos quiere mostrar. De paso, podríamos ver también a algún miembro del Bando Nacional fusilando republicanos. Pero, ¿para qué?.
De todos modos, lo que aún resulta más sangrante, es que hayamos podido vender nuestra historia a un puñado de guionistas y directores que lo más lejos que han llegado en el conocimiento de nuestra cultura e historia sea la Leyenda Negra y el chipirón. Como se titula la crítica, "Encontrarás dragones" debería haberse editado con destino al género de la TVmovie.

Antes de que alguien me critique por decir que el Opus Dei es una secta, tengo que indicar que yo fuí acólito de dicha secta durante varios años. Las técnicas que usaron conmigo y mis amigos fueron las que se describen en los libros sobre sectas.
Es facil decir que no opinas ni bien, ni mal sobre el Opus Dei cuando no te ha tocado de cerca. ¿Piensas lo mismo de una niña violada físicamente, por el hecho de que nunca han violado a nadie de tu entorno? Seguro que no. Seguro que pones el grito en el cielo.

Jose María fué un enfermo mental, que ha destrozado demasiadas vidas porque oía voces, tenía visiones, etc. Fomentaba la automutilación, eso si que lo muestra bien. Pero por lo demás se ve perfectamente quien financia el producto, ya que lo muestra como una inocente persona, infantíl, pero consecuente con sus ideas, sobre todo la del grano de cacao, que la repiten varias veces para los "borricos" la entendamos.

Frases como "Nuestros jefes se pelean en Madrid" o "No nos mandan nada de Madrid" quieren dejar en mal lugar al gobierno de la república, cuando a estas alturas, ya se sabe que Francia, Gran Bretaña y EEUU entre otros, se desentendieron del conflicto.

Totalmente prescindible ya que cuenta pocas cosas, distorsionadas y encima mal contadas.

Podían haber recortado tanta paja de la película y contarnos como Franco financió Torreciudad con el dinero de todos los españolitos o que obsesiones sexuales le llevaban a vomitar su otra "obra" Camino. No sigo, porque me estoy cabreando.

Buena película sobre la vida del fundado del "Opus Dei", santo de la Iglesia Católica desde 2002, un hombre que desde muy joven aprendió que en la vida uno se topa o halla dragones de todo tipo, los cuales tratarán de joderte de distintas maneras y hacerte perder el norte o el verdadero sentido de lo importante, esencial o trascendente.

Viene muy a cuento la cita de Oscar Wilde dentro del guión: "Todo santo tiene un pasado y todo pecador un futuro."

La película está muy bien construida, desarrollada y no toma partido por la ideología ni la violencia de ninguno de los bando enfrentados en la Guerra Civil Española. Aunque eso sí, se alía con las fuentes que cifran la cantidad de muertos provocados en dicha guerra en el exagerado número de mediio millón de personas. Según los historiadores más rigurosos y no partidarios de uno u otro bando contendiente, la cifra más real de muertos yéndose por lo alto, viene a ser de 250.000 muertos, entre los que se incluyen, civiles y todo tipo de víctimas derivadas del citado conflicto bélico entre españoles. Subir de ahí es típico de los que ven el mundo sólo con la lupa aplicada con firmeza sobre las maldades del franquismo y están empeñados en poner a Franco y su victoria como el horror más horroso de cuantos horrores hayan ocurrido en el planeta Tierra, a la par que son la más de comprensivos y no le reprochan nada (ni siquiera los 20 millones de muertos que causó entre sus propios compatriotas), a Stalin u otros líderes de ideología comunista, marxista o izquierdomaníaca en el siglo XX.

¡Atención a esta perla reflexiva que nos deja la historia de "Encontrarás dragones"!: "El azar no es ciego". Toda una lección de metafísica para ciertos filósofos que por no saber no saben siquiera que la metafísica es la primera rama de la filosofía y forma parte intrínseca de ésta.