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Rep. Dominicana La casa del caracol
1,660
Thriller
El escritor Antonio Prieto decide pasar el verano en un pueblo de la serranía malagueña, donde espera encontrar tranquilidad e inspiración para su siguiente novela. Allí conoce a Berta, una mujer por la que siente una atracción instantánea, así como a algunos personajes peculiares sobre los que empieza a escribir e investigar. Antonio comienza a descubrir que los locales guardan numerosos secretos y una perturbadora leyenda oculta. Lo ... [+]
12 de junio de 2021
37 de 43 usuarios han encontrado esta crítica útil
Comentar el cine español no es una tarea sencilla si quieres coincidir con buena parte de los que aquí comentamos o leemos los comentarios de otros. Hay quien odia el cine español por temas políticos y otros por prejuicios infundados. Hay quien aplaude a todo el cine español de manera entusiasta por intereses particulares y otros porqué son amigos o familiares de uno que ponía cables en el plató. Hay de todo pero, lo cierto, está bastante polarizado como todo en la vida. Yo, en todos los temas, ni me caso con nadie, ni me vendo y soy libre para opinar lo que me parezca...también, sobre el cine español.
Me pareció interesante el trailer de ésta película y fui a verla sin ningún tipo de prejuicio, me gustaba la temática y tiene algunos actores solventes. Éramos cuatro en la sala...y era una sala grande. A priori era el estreno de la semana, aunque solo fuese por el número de copias.
La película no llega a interesarte porqué se pierde en un bosque de pretensiones y petulancia intelectual que quiere y no puede. Es otro vano intento de hacer cine español de género con una absoluta falta de talento. Nuestros nuevos cineastas han visto mucho cine y copian de aquí y de allí sin orden ni concierto...no se dan cuenta de que, algunos, también hemos visto mucho cine y enseguida nos damos cuenta. Los plagios, no son homenajes.
Un reparto interesante con un guión muy mediocre y una dirección morosa que, queriendo contentar a todos, solo logrará el aplauso de los cercanos.
¿La historia? Demasiado densa para el principio del verano y, sobre todo, viendo la película después de un bufé de pizza y pasta.
Me pareció interesante el trailer de ésta película y fui a verla sin ningún tipo de prejuicio, me gustaba la temática y tiene algunos actores solventes. Éramos cuatro en la sala...y era una sala grande. A priori era el estreno de la semana, aunque solo fuese por el número de copias.
La película no llega a interesarte porqué se pierde en un bosque de pretensiones y petulancia intelectual que quiere y no puede. Es otro vano intento de hacer cine español de género con una absoluta falta de talento. Nuestros nuevos cineastas han visto mucho cine y copian de aquí y de allí sin orden ni concierto...no se dan cuenta de que, algunos, también hemos visto mucho cine y enseguida nos damos cuenta. Los plagios, no son homenajes.
Un reparto interesante con un guión muy mediocre y una dirección morosa que, queriendo contentar a todos, solo logrará el aplauso de los cercanos.
¿La historia? Demasiado densa para el principio del verano y, sobre todo, viendo la película después de un bufé de pizza y pasta.
25 de agosto de 2021
16 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
El cartel no es más que una falsa promesa de ser un thriller de terror en condiciones.
Como si se tratara de una historia de Stephen King, un escritor alquila una casa aislada en un pequeño pueblo con gente muy rara.
Hay breves momentos en los que parece que la directora pone todo su empeño en hacer las cosas bien, pero me temo que al final no lo consigue.
Paz Vega es lo único que podría salvar, y aun así con reservas, de este claro desastre.
Empieza como “El resplandor” (ahí, picando alto), sigue un poco como “¿Quién puede matar a un niño?” y después comienza un galimatías de escenas de terror muy mal hechas en el bosque y en la casa, con un protagonista con patillas a lo Curro Jiménez, que actúa fatal.
También tenemos a Luna Fulgencio y la otra niña corriendo de aquí para allá cual gemelas de “El resplandor” (otra vez) sin dar miedo ninguno ni cuando se ponen la máscara del lobo (“Cementerio de animales”).
Pero bueno, que ya sabemos que a Macarena Astorga y a la guionista les gusta King. Pero a la hora de asustar, no les llega mucho, la verdad.
Esos efectos sonoros de ruidos no identificados, están muy mal hechos y no dan miedo. La reacción del protagonista tampoco. Hay una escena en la que va caminando y prácticamente de una toma a la siguiente se ha hecho de noche bruscamente. Es patético.
Respecto a la ambientación, factura y diseño de producción, me han recordado al viejo cine español cutre de terror de la época de Paul Naschy, o más recientemente de la “Fantastic factory”, concretamente a “Dagon”. Pero, increíblemente, “Dagon” está mejor hecha que esta. Con esto, se echa por tierra el poco interés que podría tener la historia.
Luego tenemos también el surrealismo de los diálogos con los “simpáticos” personajes del pueblo, que parecen una mezcla entre película de David Lynch y “Torrente”.
Llegados a tal cúmulo de defectos, ya me da igual la maldición, los ruidos y Esteban.
¡Qué película más cutre!
Como si se tratara de una historia de Stephen King, un escritor alquila una casa aislada en un pequeño pueblo con gente muy rara.
Hay breves momentos en los que parece que la directora pone todo su empeño en hacer las cosas bien, pero me temo que al final no lo consigue.
Paz Vega es lo único que podría salvar, y aun así con reservas, de este claro desastre.
Empieza como “El resplandor” (ahí, picando alto), sigue un poco como “¿Quién puede matar a un niño?” y después comienza un galimatías de escenas de terror muy mal hechas en el bosque y en la casa, con un protagonista con patillas a lo Curro Jiménez, que actúa fatal.
También tenemos a Luna Fulgencio y la otra niña corriendo de aquí para allá cual gemelas de “El resplandor” (otra vez) sin dar miedo ninguno ni cuando se ponen la máscara del lobo (“Cementerio de animales”).
Pero bueno, que ya sabemos que a Macarena Astorga y a la guionista les gusta King. Pero a la hora de asustar, no les llega mucho, la verdad.
Esos efectos sonoros de ruidos no identificados, están muy mal hechos y no dan miedo. La reacción del protagonista tampoco. Hay una escena en la que va caminando y prácticamente de una toma a la siguiente se ha hecho de noche bruscamente. Es patético.
Respecto a la ambientación, factura y diseño de producción, me han recordado al viejo cine español cutre de terror de la época de Paul Naschy, o más recientemente de la “Fantastic factory”, concretamente a “Dagon”. Pero, increíblemente, “Dagon” está mejor hecha que esta. Con esto, se echa por tierra el poco interés que podría tener la historia.
Luego tenemos también el surrealismo de los diálogos con los “simpáticos” personajes del pueblo, que parecen una mezcla entre película de David Lynch y “Torrente”.
Llegados a tal cúmulo de defectos, ya me da igual la maldición, los ruidos y Esteban.
¡Qué película más cutre!
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
28 de junio de 2021
15 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
Las trampas al buen aficionado, la historia delirante, con un desarrollo que se pretende perturbador, no logran que el espectador en su mayoría, entre en lo que allí se cuenta.
Personajes de un solo trazo, abigarrados y sin desarrollo; Macarena Astorga intenta acariciar varios géneros, sin conseguir la intensidad necesaria en ninguno de ellos. Subraya cuestiones de pretendida trascendencia para la narrativa, que se pierden, acompañados por una banda sonora intensa, excesiva... tal vez inadecuada.
Las interpretaciones parecen ir por libre. Como ejemplo: Paz Vega, muy poco creíble, gestionando su caracterización de manera absolutamente epidérmica.
...
Personajes de un solo trazo, abigarrados y sin desarrollo; Macarena Astorga intenta acariciar varios géneros, sin conseguir la intensidad necesaria en ninguno de ellos. Subraya cuestiones de pretendida trascendencia para la narrativa, que se pierden, acompañados por una banda sonora intensa, excesiva... tal vez inadecuada.
Las interpretaciones parecen ir por libre. Como ejemplo: Paz Vega, muy poco creíble, gestionando su caracterización de manera absolutamente epidérmica.
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18 de septiembre de 2021
10 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película empieza intrigante aunque recuerda a otras muchas muy superiores, se deja ver pero conforme avanza cada vez son más evidentes sus carencias y defectos, hasta que llegamos a los últimos 20 minutos que tiran TODO por la borda.
En ocasiones tiene cierto tufillo a telefilm de sobremesa de estos que dan en Antena 3 a la hora de la siesta, siempre con tramas de asesinatos, desapariciones, venganzas, secretos, etc., pues aquí también se cumple todo.
Su principal virtud es que a pesar de ser algo cutre se deja ver, no aburre y te mantiene entretenido por saber cómo termina todo, aun con cierta previsibilidad de la trama; las actuaciones me han parecido decentes y una cosa que también destaco, aunque esto no deja bien parado al cine español, es que los diálogos entre los personajes se entendían y no he tenido que poner el volumen al máximo para poder descifrar de que hablan como en la mayoría de películas españolas, donde no se entiende nada porque no vocalizan.
Ahora bien, aunque se deja ver la película tiene tres grandes fallos que hacen que sea un producto muy flojo:
1) La sensación constante de déjà vu, pues todo lo que vemos recuerda a muchas otras películas (en spoiler).
2) Para mí lo más grave de todo, su trama, porque además de ser previsible nos está vendiendo constantemente algo más grande de lo que al final acaba siendo, para rematar los últimos 20 minutos intentan sorprender con un giro que se ve venir y lo único que provoca es dejar varios cabos sueltos y contradicciones que no encajan con lo que hemos visto antes (en spoiler también).
3) Tampoco queda claro a qué juega la película, pues a ratos quiere ser una película de terror, otras un thriller psicológico, mezclado con ciertos toques de drama que al final da como resultado una floja mezcla.
En resumen, película que solo destaca porque se deja ver y no aburre pero que no recomiendo a nadie que sea asiduo al cine pues es un batiburrillo de otras películas y muchas ideas que no terminan de encajar.
Muy floja.
En ocasiones tiene cierto tufillo a telefilm de sobremesa de estos que dan en Antena 3 a la hora de la siesta, siempre con tramas de asesinatos, desapariciones, venganzas, secretos, etc., pues aquí también se cumple todo.
Su principal virtud es que a pesar de ser algo cutre se deja ver, no aburre y te mantiene entretenido por saber cómo termina todo, aun con cierta previsibilidad de la trama; las actuaciones me han parecido decentes y una cosa que también destaco, aunque esto no deja bien parado al cine español, es que los diálogos entre los personajes se entendían y no he tenido que poner el volumen al máximo para poder descifrar de que hablan como en la mayoría de películas españolas, donde no se entiende nada porque no vocalizan.
Ahora bien, aunque se deja ver la película tiene tres grandes fallos que hacen que sea un producto muy flojo:
1) La sensación constante de déjà vu, pues todo lo que vemos recuerda a muchas otras películas (en spoiler).
2) Para mí lo más grave de todo, su trama, porque además de ser previsible nos está vendiendo constantemente algo más grande de lo que al final acaba siendo, para rematar los últimos 20 minutos intentan sorprender con un giro que se ve venir y lo único que provoca es dejar varios cabos sueltos y contradicciones que no encajan con lo que hemos visto antes (en spoiler también).
3) Tampoco queda claro a qué juega la película, pues a ratos quiere ser una película de terror, otras un thriller psicológico, mezclado con ciertos toques de drama que al final da como resultado una floja mezcla.
En resumen, película que solo destaca porque se deja ver y no aburre pero que no recomiendo a nadie que sea asiduo al cine pues es un batiburrillo de otras películas y muchas ideas que no terminan de encajar.
Muy floja.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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8 de junio de 2021
12 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
*Territorio hostil
Javier Rey, conocido sobre todo por series de televisión como Velvet o Fariña, da vida a Antonio Prieto. Escritor en busca de tranquilidad para recuperar su inspiración, se traslada a un pequeño pueblo, en medio del monte. No recibirá una grata bienvenida, precisamente, por parte de los lugareños. Ni siquiera de las dos niñas a quien conoce nada más llegar. De estas dos hermanas, la mayor, Sole, está interpretada Ava Salazar, una de las hijas de Paz Vega.
Será esta interesante actriz, sevillana de nacimiento, quien le alquile la casona durante un mes. Por cierto, cabe destacar el paulatino progreso y valía en su carrera profesional. Berta, así se llama su personaje esta vez, será la única que le demuestre un trato agradable y amable.
La casa del caracol, rodeada de bosque, es en sí misma un lugar extraño, o más bien inquietante. Poco a poco, el protagonista irá descubriendo que no está solo.
Los habitantes del pueblo son muy peculiares y salta a la vista que esconden secretos. Secretos que son fruto de supersticiones. Un espeluznante ser, “el Vímeo”, visita de cuando en cuando el lugar, para asesinar a mujeres de manera despiadada.
Suspense y superstición van de la mano. También hay un viejo cobertizo, hogar de un hombre el Esteban, contrahecho, deformado, apartado por su crueldad.
*Con la Iglesia hemos topado
Un día, Antonio, huyendo por el bosque de algo o alguien que no sabía precisar muy bien, se topa de repente con un sacerdote (Carlos Alcántara). Entablarán una relación entrañable que supondrá una nota de normalidad entre tanta sinrazón. Le pone en antecedentes sobre las leyendas y supersticiones del pueblo.
Sin embargo, como otras tantas cosas, el buen hombre no será lo que aparenta. No le gusta que le llame por su nombre, Benito, sino que le diga Padre. Este detalle que puede pasar desapercibido, será fundamental para comprender el espantoso final.
Y es que en realidad, a lo largo del desarrollo de La casa del caracol, se van dando pistas sobre lo que va a suceder. Como miguitas de pan que van dejando para seguir el camino. Por eso, aunque el final es en cierto modo sorprendente, hay algo que lo hace poco creíble.
*Conclusión
Tiene muchos ingredientes para despertar suspense, expectación. Escenas de columpios que se mueven solos, persecuciones en el bosque, voces susurradas dentro de casa…
Sin embargo, no llega a inquietar lo suficiente. Quizás porque tanto los personajes, como ciertas escenas, sean previsibles. De tan extraños e inusitados que son, más que sorprender o asustar, pueden resultar grotescos.
A favor, las actuaciones de todos los actores, la recreación de aquella época y conseguir que La casa del caracol sea como un personaje más, con su propia personalidad.
Escrito por Irene Abecia Navarro
Javier Rey, conocido sobre todo por series de televisión como Velvet o Fariña, da vida a Antonio Prieto. Escritor en busca de tranquilidad para recuperar su inspiración, se traslada a un pequeño pueblo, en medio del monte. No recibirá una grata bienvenida, precisamente, por parte de los lugareños. Ni siquiera de las dos niñas a quien conoce nada más llegar. De estas dos hermanas, la mayor, Sole, está interpretada Ava Salazar, una de las hijas de Paz Vega.
Será esta interesante actriz, sevillana de nacimiento, quien le alquile la casona durante un mes. Por cierto, cabe destacar el paulatino progreso y valía en su carrera profesional. Berta, así se llama su personaje esta vez, será la única que le demuestre un trato agradable y amable.
La casa del caracol, rodeada de bosque, es en sí misma un lugar extraño, o más bien inquietante. Poco a poco, el protagonista irá descubriendo que no está solo.
Los habitantes del pueblo son muy peculiares y salta a la vista que esconden secretos. Secretos que son fruto de supersticiones. Un espeluznante ser, “el Vímeo”, visita de cuando en cuando el lugar, para asesinar a mujeres de manera despiadada.
Suspense y superstición van de la mano. También hay un viejo cobertizo, hogar de un hombre el Esteban, contrahecho, deformado, apartado por su crueldad.
*Con la Iglesia hemos topado
Un día, Antonio, huyendo por el bosque de algo o alguien que no sabía precisar muy bien, se topa de repente con un sacerdote (Carlos Alcántara). Entablarán una relación entrañable que supondrá una nota de normalidad entre tanta sinrazón. Le pone en antecedentes sobre las leyendas y supersticiones del pueblo.
Sin embargo, como otras tantas cosas, el buen hombre no será lo que aparenta. No le gusta que le llame por su nombre, Benito, sino que le diga Padre. Este detalle que puede pasar desapercibido, será fundamental para comprender el espantoso final.
Y es que en realidad, a lo largo del desarrollo de La casa del caracol, se van dando pistas sobre lo que va a suceder. Como miguitas de pan que van dejando para seguir el camino. Por eso, aunque el final es en cierto modo sorprendente, hay algo que lo hace poco creíble.
*Conclusión
Tiene muchos ingredientes para despertar suspense, expectación. Escenas de columpios que se mueven solos, persecuciones en el bosque, voces susurradas dentro de casa…
Sin embargo, no llega a inquietar lo suficiente. Quizás porque tanto los personajes, como ciertas escenas, sean previsibles. De tan extraños e inusitados que son, más que sorprender o asustar, pueden resultar grotescos.
A favor, las actuaciones de todos los actores, la recreación de aquella época y conseguir que La casa del caracol sea como un personaje más, con su propia personalidad.
Escrito por Irene Abecia Navarro
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