Soy una entusiasta del cine y devoro películas en pantalla grande, pero pocas veces he visto una película tan mala y de tan baja calidad:
1.-Woody Allen vive de los intereses generados por sus películas en el pasado. Sus películas se caracterizaron en el pasado por una trama y unos personajes que giraban en torno al protagonista, donde la interpretación de los actores que rodeaban al mismo quedaba oculta tras ese personaje. Películas donde todo es secundario: el argumento, la interpretación del resto de actores, la calidad de la imagen, etc, todo menos el protagonista.
2.-El problema surge cuando Woody Allen ya no interpreta. Su guión, aunque en un principio pudiera ser interesante, lo destroza a base de diálogos insustanciales, somete a los actores a una especie de anquilosamiento interpretativo que aumenta más la insustancialidad de la obra.
3.-A todo ello hay que unir una calidad de sonido pésima donde en determinados momentos el volumen de algún sonido concreto se eleva por encima del diálogo.
4.-incluso esos malos diálogos podían haberse mejorado si hubiese dejado a los actores INTERPRETAR sus papeles.
RESUMIENDO: una película de bajísima calidad.

La película, que cuenta con tres buenos actores, especialmente dos de ellos, Jodie Foster y Abigail Breslin, podía haberse convertido en un film de mayor calidad si no fuera por el argumento tan flojo de la misma.
La historia, que con ciertos retoques podría haberse convertido en una muy buena película, ha quedado convertida en algo que no se sabe qué es: no es una película para niños ni tampoco para todos los públicos.