Russell viene de firmar El Lado Bueno de las Cosas, La Gran Estafa Americana y The Fighter, obras importante y que han ido afinando su cine hasta llegar a su magnum opus que es esta.

Un desfile de estrellas que consiguen hacer suyos los personajes, haciéndote dudar de hasta donde llega el guion y hasta donde la aportación del propio actor. Como siempre destaca Christian Bale en uno de los papeles más entrañables de su carrera y un Robert De Niro que con un simple giro de muñeca te recuerda por que es uno de los más grandes de la historia.

Una película que pese a tener un ritmo más propio de comedia, se arrastra en su tramo medio y se recupera con la aparición de De Niro. Quizás es difícil asimilar el salto que la película hace desde el buddy film, a la comedia romántica, el cine bélico y el noir. Personalmente, encuentro este baile delicioso.

Es en las partes más emotivas y sinceras en las que la película se hace grande, en la comedia de pequeños gestos y palabras, terminando en un apoteósico clímax política y reivindicativo sobre la eterna dinámica de los poderosos, indolentes y adinerados, dejándonos a los demás un mundo en el que sería imposible vivir si no fuera por el amor y el arte.

La película es buena. Es genial. La película tiene fallos. Qué pena.

La atmósfera es húmeda y seca, oscura y luminosa, parecida a la de la primera Blade Runner. Los protagonistas son honrados y ladrones, obsesionados y centrados. Cine noir post pandemia y pre apocalipsis.

Hugh Jackman, Rebecca Ferguson y Thandie Newton hacen lo que la historia pide, siendo especialmente interesante el personaje del mitad detective mitad psicólogo de recuerdos.

La trama trata de mostrarnos un mundo centrado en el pasado y en los recuerdos. Cualquier pasado fue mejor que el presente y el futuro que se nos muestra. En este presente futuro, Los que tienen dinero y poder siguen aprovechándose de los que no lo tienen, en este caso con una crisis climática de por medio.

Pese a que la narración es ordenada y no especialmente brumosa, no sabe dirigirte hacia los momentos más emocionantes y determinantes, tanto para la trama como para los personajes, resultando algo fría en su desenlace y desarrollo. Este es su principal error.

En definitiva, es una muy buena película. Una trama profunda y trabajada, unos actores en plena forma y con bastante detalles originales como para merecer la pena verla.

Nunca he escrito una crítica y no creo que vuelva a escribir nunca ninguna, pero el cabreo que tengo encima hay que echarlo de alguna manera.
No veáis esta película. Le pongo un 5, es decir, no es mala, ni mucho menos. Pero sabíamos que esta película no iba a ser mala. Vamos al cine a ver un peliculón. Quizás una de las mejores películas de superhéroes hechas hasta la fecha. Pero NO. Tenemos una película sin chicha, y por supuesto, sin limoná. No hay villano, no hay protagonista, no hay acción, no hay nada. Creo que no hay ni guionista, y por consiguiente tampoco guión. Sólo se salva gracias a Mercurio, la mujer que abría portales (no se sabe nada más sobre ella) y, como siempre, ambos magnetos, el 5 de la película es por ellos.
No a películas que solo dan para trailers. No a guiones escritos por monos (con todo el respeto hacia los monos). Ya estoy más calmado.