Me declaro admiradora de la obra de Clint Eastwood. Esperaba un buen producto, no lo niego, pero esta película logró que deseara salir a mitad proyección. Otros más decididos así lo hicieron y no fueron pocos.

El guión es endeble, simple, repetitivo.
Los diálogos, apenas existentes, son cortantes y faltos de originalidad.
El protagonista entra en contacto con la mafia de modo artificial, sin buscarlo, caído del cielo.
Clint se sirve sistemáticamente, de planos que disimulan sus dificultades para moverse, subir escaleras........
La relación con la familia es irreal, nada convincente, etc, etc.

Es un gran profesional y un hombre esforzado , pero no me ciega la admiración: esta película es decepcionante.

Termino la película con la sensacion de haber vivido en la cabeza del protagonista, perdido en un mundo caótico.. Agradezco también la magnifica interpretación de Anthony Hopkins y esos cuidados diálogos.

Pero a mitad del film, he mirado el reloj intuyendo que la segunda parte iba a ser más de lo mismo. Supongo que han tenido la misma sensación, los dos espectadores que ha abandobado la sala en ese momento, hecho no desdeñable, habida cuenta de las contadísimas personas que acudimos a los cines esta temporada.

Repetitiva.

Una película leeeenta, con diálogos cortados y aburridos plagados de silencios y dudas, con una fotografía muy básica que abusa de los interiores oscuros y de los exteriores nublados, con unos actores hieráticos a excepción de la protagonista, con reacciones morbosas o descontroladas....

Quiere ser intimista, analizadora, un intento de estar a la altura de las películas que hace unos años denominábamos de Arte y Ensayo, pero......ni de lejos.