El nuevo universo de DC de James Gunn no podía empezar mejor. Esta serie de animación sigue el mismo concepto que triunfó en la serie Peacemaker.

Serie adulta, con un guion inteligente, exprimiendo al máximo a personajes de tercera línea, como solo Gunn es capaz de hacer en el mundo de los superhéroes.

Nadie se puede quejar de la acción, llena de escenas no aptas para menores, con alguna que otra cosa muy hardcore.

Te puede no gustar el uso excesivo de la técnica flashback, aunque a mí me ha parecido perfecta en este caso particular, ya que es como ha conseguido sacar el jugo a todos los personajes del grupo.

El único "pero" objetivo que le puedo sacar es el presupuesto. Viendo el nivel... ¡ojalá una animación de mayor calidad!

Lo mejor es que supura cariño. Todos los detalles están muy cuidados, que es lo que este género necesita.

Serie teen de detectives fantasmas en un mundo de fantasía.

Ha sido una sorpresa muy negativa para mí. Tenía muchas ganas de ver esta adaptación de la obra de Neil Gaiman, que me encanta. Además, la serie está creada por Steve Yockey, creador de The Flight Attendant y guionista de Doom Patrol, ambas series que me gustaron muchísimo.

Tenía todo para entusiasmarme, pero no se me ocurre nada bueno que destacar.

Del reparto no salvo a nadie; es de los peores que me he encontrado en Netflix en mucho tiempo.

El tono de la obra no me queda claro: no saca partido a la trama ni tiene un sentido del humor concreto.

El guion es del montón, los planos son propios de cualquier serie corriente, y el CGI es mediocre.

Es una mezcla sin alma ni ganas que no me ha convencido ni atrapado en ningún momento.

Aventura clásica para todos los públicos dentro del universo Star Wars, que podrá disfrutar cualquiera, aunque no sepa nada del mundo Jedi.

Lo mejor, sin duda, es el actor Jude Law, capaz de brillar pese a trabajar con un guion muy justito y unos compañeros del montón. Es quien marca el ritmo, con risas principalmente, pero también con breves momentos dramáticos, que, para mí, son los mejores de la serie.

La grata sorpresa la pone el nuevo droide SM-33, un droide pirata al que humanizan mucho y que protagoniza varias de las mejores escenas.

Por otro lado, los verdaderos protagonistas son un grupo de niños, los cuales, para mí, no han estado al nivel. Seguramente, quien no ha brillado nada es el equipo de casting.

Producción a la altura, pero que no brilla. Historia previsible, pero funcional.

Entretenida, pero a años luz de Los Goonies.

Que esta no sea la ocasión en la que menos tiempo ha pasado para crear una nueva historia alternativa de uno de los superhéroes más seguidos y queridos, no significa que realmente necesitásemos una nueva visión.

Pero aquí la tenemos. De entrada, el estilo artístico me echa un poco para atrás. No al 100%, pero, dejando a un lado el marcado estilo cómic de la introducción, el resto se queda en un punto intermedio que, desde luego, no suma puntos a su favor.

Hay nuevos personajes y también se recuperan viejos conocidos, aunque con cambios en su personalidad en la mayoría de los casos.

El enfoque general es excesivamente para todos los públicos. No creo que sea una maravilla para los más pequeños y, al mismo tiempo, carece de profundidad para los adultos.

Tiene un poco de todo, pero no profundiza en nada. Hay peleas, pero con una animación del montón. Romances, pero los previsibles. Villanos, pero dejan mucho que desear.

Y no quiero entrar en lo "woke". Sí, el protagonista dijo que para él no lo era, y es cierto que, en comparación con lo que se ve por ahí, no es de lo peor. Pero tiene muchas pequeñas decisiones claramente influenciadas, y ese es precisamente el problema.

Un cinco, y siendo muy amable.

La segunda temporada de esta acción/aventura es continuista a todos los niveles respecto a la primera.

Vuelve a seguir las desventuras del variopinto grupo de protagonistas para hacerse con un nuevo tesoro. La forma de hacerlo es igual de mala que en otras series de Netflix, como, por ejemplo, La Casa de Papel.

Guion e historia previsible, escenas de acción cringe, humor pobre y romance de relleno. Desde luego, no son buenas armas para crear nada.

Los nuevos personajes no aportan nada interesante, pero tampoco es que bajen más un nivel que ya está por los suelos.

Parece ser que habrá tercera temporada, la cual dudo que cambie para mejor.