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Voto de eristuff:
68 280
Ciencia ficción. Drama
Cuando naves extraterrestres comienzan a llegar a la Tierra, los altos mandos militares piden ayuda a una experta lingüista (Amy Adams) para intentar averiguar si los alienígenas vienen en son de paz o suponen una amenaza. Poco a poco la mujer intentará aprender a comunicarse con los extraños invasores, poseedores de un lenguaje propio, para dar con la verdadera y misteriosa razón de la visita extraterrestre... Adaptación del relato ... [+]
28 de noviembre de 2016
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
De vez en cuando me gusta ver algo de ciencia-ficción para asentarme en la realidad que nos rodea.
En esta ocasión, la Tierra es visitada por unas naves que son como unos granos de café gigantes, tripuladas por unos seres extraños que no se sabe a lo que vienen. Podría ser solo una visita de cortesía, o a hacer fotos, o a la final de Champions, o quizás a salvar a sus congéneres terrestres menos evolucionados de ser servidos en bares de tapas.
No se les entiende un pimiento cuando hablan, reverbera mucho como si estuvieran metidos en tinajas, así que no se sabe.
Y para saberlo, el militar de ojo más agudo contrata a la mujer más triste del mundo, especialista en idiomas. Sabe todos los idiomas terrestres, y está muy triste porque vaya donde vaya entiende todas las tonterías que se dicen. Por eso lo de hablar con alguien (independientemente del número de patas que tenga) al que no va a entender le resulta novedoso y tentador.
Bajo esta prometedora premisa se desarrolla la película. A mí no me ha decepcionado. Quizás me gustaría que el científico acompañante hubiera sido algo menos estereotipado, mentecato e incluso inútil, pero se habrá querido reservar el metraje que eso requería para mejores fines. Probablemente el relato (ojo, premio Nébula 2000) en que está basado lo desarrolle mejor.
Por otro lado muchas cosas buenas, destacando que es un goce visual y sobre todo el lenguaje extraterrestre que han creado, de lo mejor que he visto en ciencia-ficción.
Gustará a: los muy cafeteros, deterministas, calamares
No gustará a: físicos teóricos, Embajador de Marte, monolingües acérrimos
En esta ocasión, la Tierra es visitada por unas naves que son como unos granos de café gigantes, tripuladas por unos seres extraños que no se sabe a lo que vienen. Podría ser solo una visita de cortesía, o a hacer fotos, o a la final de Champions, o quizás a salvar a sus congéneres terrestres menos evolucionados de ser servidos en bares de tapas.
No se les entiende un pimiento cuando hablan, reverbera mucho como si estuvieran metidos en tinajas, así que no se sabe.
Y para saberlo, el militar de ojo más agudo contrata a la mujer más triste del mundo, especialista en idiomas. Sabe todos los idiomas terrestres, y está muy triste porque vaya donde vaya entiende todas las tonterías que se dicen. Por eso lo de hablar con alguien (independientemente del número de patas que tenga) al que no va a entender le resulta novedoso y tentador.
Bajo esta prometedora premisa se desarrolla la película. A mí no me ha decepcionado. Quizás me gustaría que el científico acompañante hubiera sido algo menos estereotipado, mentecato e incluso inútil, pero se habrá querido reservar el metraje que eso requería para mejores fines. Probablemente el relato (ojo, premio Nébula 2000) en que está basado lo desarrolle mejor.
Por otro lado muchas cosas buenas, destacando que es un goce visual y sobre todo el lenguaje extraterrestre que han creado, de lo mejor que he visto en ciencia-ficción.
Gustará a: los muy cafeteros, deterministas, calamares
No gustará a: físicos teóricos, Embajador de Marte, monolingües acérrimos
