Otro filme sensible y realista parido por un cineasta europeo...

¿Qué sucede en la historia? Poca cosa. Los personajes están solos, jodidos y apenas hablan. Hay muchos silencios y la gente mira por las ventanas pensativamente sin parar (sí, es UNA de esas pelis), pero apenas hay conflicto ni evolución de personajes. Muchas escenas parecen alargadas artificialmente y podrían haber sido recortadas en montaje, pero la película apenas alcanza la hora y media de duración.

Resumiendo: la clase de filme que se puede ver tumbado en el sillón un domingo por la tarde. Aunque des cabezadas no te perderás nada importante.

Porque no ocurre NADA.

Y alguien puede aducir: "es que la realidad es así. La gente no se comunica y está hecha polvo". Y yo digo: "¿Para que ir al cine a ver algo que no es más que la vida de gente a la que te aburriría conocer?"

No tiene sentido.

(Nota: hasta las narices del sutil cine francés estoy, oigan)