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España España · Salamanca
Voto de La Maga:
7
Drama Pierre y Géraldine, una pareja que desea adoptar a un bebé, emprende un viaje a Camboya, un país castigado por la historia. Una vez allí, comienza una aventura agotadora: ronda de visitas a orfanatos, enfrentamiento con las autoridades francesas y camboyanas, amenazas de traficantes y, además, el recelo del grupo de aspirantes a padres adoptivos que el azar ha reunido allí. A raíz de esta peregrinación, la pareja se desgarra, se ... [+]
12 de enero de 2007
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
En uno de los relatos que componen el libro Putas asesinas, de Roberto Bolaño, un turista de buena fe recorre las zonas más peligrosas de una megalópolis. Es tal la miseria, podredumbre y violencia que pueblan sus calles, y contradictoriamente, conviven éstas tan armoniosamente con las ganas de vivir, que el protagonista se ve rápidamente abocado a la fascinación. Pero, cuando en un arrabal descubre un padre capaz de mutilar a su propio hijo para alimentarse, la repulsión hacia sí mismo acabará enfermando al curioso impertinente.
La visión de un turista
En una de estas ciudades, el cinéfilo empedernido que fue Bertrand Tavernier, fija su mirada, últimamente muy preocupada y concienciada socialmente, para abordar el tema de la adopción. Apoyado en un guión escrito por su propia hija, este intelectual de la vieja escuela francesa disecciona la trayectoria vital de una pareja de franceses incapaz de tener hijos. Con cámara al hombro, y rol de guía turístico, el director de Hoy empieza todo consigue establecer una empatía entre el público y sus protagonistas gracias a un seguimiento concienzudo de los engranajes que componen el proceso de adopción. Por el camino, un único lastre, su excesiva duración, causada seguramente por la fascinación que Tavernier sintió durante su estancia en Camboya, pero que resta contundencia y emoción a la odisea de sus compatriotas.
Géraldine quiere ser madre a toda costa, lo que la vuelve irracional. Intensa, deambula entre reacciones muy físicas y un mundo interior turbulento. Pierre observa y se aísla para procurar no empatizar con lo que le rodea, lo que tortura a su mujer. Frente a ellos, un paisaje de orfanatos, intermediarios y funcionarios en el que priman las trabas burocráticas, la desidia y la corrupción.
A diferencia del personaje de Bolaño, los que aquí van en busca de la pequeña Lola no afrontan de cara los dilemas morales que les afectan. Tavernier asume el papel de un reportero diplomático, carga contra las ventajas a la carta que poseen los norteamericanos, pero se esconde de la tensión y los conflictos interiores que provoca el mundo externo. No obstante, la denuncia queda clara: los gobiernos de estos países utilizan las adopciones para lucrarse, convirtiendo a estos niños en meras mercancías.
La Maga
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