3 de septiembre de 2011
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Si hubiera que hacer una lista de los cineastas que más han contribuido a la industria del cine, Charlie Chaplin, sin duda, estaría en ella. En la prehistoria del séptimo arte, cuando las pantallas todavía no disfrutaban de sonoridad y no existía el tecnicolor, cineastas como Chaplin hicieron que la curiosidad picara a la gente y que, con ello, el cine empezara a cobrar la importancia de hoy en día.
Este largometraje, Richard Attemborough, rinde un merecido homenaje a este gran director, actos, productor y compositor. Para ello, y en base a su propia bilibografía, nos mostrará la vida del creador del vagabundo más famoso de la historia del cine. Así pues, conoceremos sus problemas familiares, como nació su relación con el mundo del cine, cómo nació Charlot, sus muchos coqueteos con las féminas, y el momento en el que le expulsaron de EEUU.
No obstante, Richard Attemborough comete un error que los más fieles seguidores de las aventuras de Charlot seguramente no le perdonen: dejar de lado el personaje de Charlot para centrarse en los escarcéos de Chaplin con las mujeres. La vida amorosa de Charlie Chaplin es interesante, pero lo son mucho más, aspectos poco desarrollados en la película como el personaje que le dio fama o las razones por las que un mito del cine fuera expulsado de EEUU.
Aún así, la película cuenta con grandes puntos a favor, como mostrarnos las razones que le dieron a Chalin a rodar sus películas más significativas, o una escena en la que al más puro estilo "Charlot" se nos trata de hacer revivir sus películas.
Respecto a los intérpretes, alabar a uno de los artistas con más talento del panorama internacional, Robert Downey Jr. También es importante hacer mención a la hija del homenajeado, Geraldine Chaplin, encarnando a su propia abuela.
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