Recreación procedente de Noruega de las hazañas de uno de sus héroes históricos. No hay mucho más que añadir a modo de introducción.

La narración es tan gélida como los parajes en los que se movía el bueno de Roald, tanto que a veces parece que estemos viendo un documental ligeramente dramatizado. Todo es muy correcto pero también muy formal, casi teatral. Menos mal que las escenas en el hielo nos recuerdan que es cine, y dichas escenas lo cierto es que te transportan a esos lugares. Muy buen diseño de producción.

Hay que destacar que pese a ser un héroe nacional noruego no se cortan en retratarle como alguien egoísta, rencoroso y extremadamente competitivo. Su talento como explorador no le eximía de ser humano, a fin de cuentas. Curioso también el gusto que le atribuyen por las mujeres casadas. En fin, que como acercamiento al personaje no está mal, pero como obra de creación cinematográfica roza el tedio en demasiadas ocasiones.