Mira que es sencillo.
Mira que lo tenían fácil.
Son sólo 4 capítulos.....y a la mitad del primero ya te mueres de aburrimiento.
Sólo tenían que coger, poner a unos cuantos protagonistas icónicos en una ciudad/pueblo/barco/laboratorio gigante, luchar contra los zombies y demás criaturas míticas de la saga, y añadir toques de supervivencia. Y fin.
Pero nooooooooooooo. Como siempre, CAPCOM y los directores japoneses tomándose muchísimo, demasiado en serio una adaptación de un videojuego, que va de matar muertos vivientes a base de bazookazos, por amor de Dios.
Los capítulos van de rollos internacionales, conflictos entre países, gente hablando en despachos, gente hablando en submarinos, más gente hablando en una habitación, burocracia, todos muy serios, todos con cara de robots. Parece que estás viendo un drama político todo el primer capítulo. ¿Y la acción? te preguntarás. 2 minutitos de reloj, despachamos unos zombies sin gracia y venga, a seguir hablando de conflictos burocráticos.
Segundo capítulo, y parece que estás viendo un documental de Afganistán y el ejército americano. Conversaciones interminables en un submarino. Otros 2 minutitos de acción, y siguiente.
Tercer capítulo, y aún más gente hablando en China. ¿Acción? Unos 2 minutitos más, y venga.
Se podría decir que va así:
95% conversaciones aburridas de besugos
5% algo de acción descafeinada y más falsa que un billete de 7 euros
No esperéis guiños a la saga, la aparición de monstruos icónicos o secundarios...nada. Esto de Resident Evil sólo tiene el nombre, para atraer a incautos pensando que verán algo remotamente parecido al videojuego.

Ah!! Y cada capítulo son 30 minutos, lo que nos da unas 2 horas totales. Es decir, que esto era la nueva película animada de Resident Evil (las anteriores también eran infumables), cortada en 4 partes para vendértela como "serie" de Netflix. Si se creerán además que somos gilipollas.