Esta película tiene unos efectos especiales bastante buenos para la época; pero a día de hoy están muy atrasados. Tiene un argumento bastante bueno; y una perfecta situación, para hacer una película de Bond.

Alguien ha robado la nave Moonraker. Y Bond va a visitar al hombre que las construye; y por si es lo bastante sospechoso; el malo tiene una base de cohetes. Y también hay otra manía de las películas de esta época; y es que todos los villanos tienen a sus secuaces vestidos de una forma absurda, todos con armas y con un casco con el que no pueden ver gran cosa.

Para mí como SPECTRA, no hay nada con más esencia a 007.

Aquí Tiburón, se enamora de la más fea, pero se enamora, y lo que hace es que eyuda a Bond, porque se lo pide su amada. Un “individuo” así, que no se mueve por nada y por nadie; pero si cede por amor. ¡¡Hay el amor!!