El tema principal de este recomendable film es la falta de ética y de escrúpulos de las cadenas de televisión que ponen el morbo y la audiencia por encima incluso de unas vidas humanas que no significan nada, hasta pagar la retransmisión de cada asesinato, accidente de tráfico o robo con violencia a precio de oro y volver a los periodistas (los vigilantes de la noche, los llamados "nightcrawlers") verdaderos sociópatas carroñeros siempre en busca de una realidad extrema que conseguir a cualquier precio. Todo vale por la audiencia.