El problema de cualquier película que nos defrauda suele ser las expectativas que ponemos en ella. Y resulta imposible no poner expectativas en una película dirigida por Terry Jones (el director de "La vida de Brian") con las voces de todos los Monty Phyton. Es decir, es imposible no sentir emoción ante esta reunión de los magos del surrealismo y el slpastick. No obstante, "absolutamente todo" es una película que defrauda porque peca de ingenua, apenas hace gracia y los gags son propios de una película para niños. Desaprovecha todas las oportunidades en una especie de quiero y no puedo sin la menor garra. Es increíble que los Monty Pyhton (incluido su director Terry Jones) estén en este producto con buenas ideas, pero mala ejecución. Simon Pegg no tiene gracia y está encorsetado en un papel mal escrito que se limita a interpretar con el piloto automático puesto, sin dotarle de la personalidad necesaria. Apenas hay algunos momentos divertidos (relacionados todos con la originalidad de la propuesta) pero no se desarrollan correctamente. Por poner un ejemplo: el gag recurrente del perro funciona perfectamente y se desarrolla de manera inteligente pero el resto de gags recurrentes (el exnovio militar, la compañera enamorada, etc) parecen burdas copias de los gags de cualquier película de tercera. ¿En serio se necesitaba a los Python para que Jones hiciese algo tan endeble y carente de gracia? Para pasar un rato, vale. Para que los niños se echen unas risas, vale. Para acompañar una siesta de sábado por la tarde, vale. Pero señores, esto no tiene el espíritu, ni de lejos, de los Phyton (a excepción de ese primer gag protagonizado por el propio Terry Jones).