Una película de espada y brujería que, al ser rusa, se sale de los cánones comerciales típicos de Hollywood y nos presenta una historia compleja, con múltiples personajes, protagonizada por el típico ¨antihéroe¨ (que acaba siendo héroe, claro) que busca venganza.

La película tiene una ambientación y una fotografía muy buenas, con montones de paisajes (como se nota cuando se graba una peli en lo profundo del norte europeo) y mucha, mucha acción y aventura.

La película toma un aire bastante épico en su parte final, que es realmente buena, y las partes fantásticas con magia, espíritus, hechizos y demás le da un aire atrayente para los amantes de este tipo de cine.