El director alicantino Eugenio Mira, acude a la ayuda de Hollywood, con los intérpretes de ese cine, para realizar una producción española con apoyo americano. El productor de la película es Rodrigo Cortés, director de " Buried " .
La historia a priori es interesante, cosa que aumenta tras los primeros minutos, y sobre todo cuando se plantea el suspense. El director es más conocido por su labor de compositor de bandas sonoras, siendo la más conocida " Los cronocrímenes " ( ópera prima de Nacho Vigalondo, que no me llegó a convencer pese a su éxito de crítica y público ). En esta película la banda sonora la realiza Victor Reyes, y es lo mejor de la película, con un ambiente de suspense que si se mantiene en el tiempo es por este motivo.
Otro aspecto destacado es la fotografía, sobre todo cuando está tocando el protagonista.
Acudir a actores conocidos favorece el mayor gancho en taquilla, pero el coste de la película, incluyendo el sueldo de los protagonistas, no creo que permita que se recupere pese al tirón de el Hobbit y Cusack.
Es una película que está gustando, es entretenida. Esos serán alicientes para que el boca a boca funcione, y tenga éxito en taquilla.
Elijah Wood está simplemente correcto, el actor que desde sus películas con Macaulay Culkin prometía mucho, y ese niño ha crecido e interpretado grandes personajes ( por lo menos se mantiene, no como el niño rubio, compañero de generación ). Posiblemente nunca llegará a ser un buen actor dramático pero, en este tipo de películas es suficiente para interpretar a Tom Selznick. Ya fue protagonista de otra producción española, también de sus pensé, una de las mejores películas de Alex de la Iglesia " Los crímenes de Oxford " .
John Cusack hace un papel muy secundario, y tampoco da tiempo para desarrollar su talento.
Cuando se ha planteado el suspense, se acude a tópicos, y nunca se tiene claro cómo solucionar los enigmas planteados. El argumento lo podía haber usado Hitchcock para una de sus películas, en algo se parece al de " El hombre que sabía demasiado ", pero el maestro de suspense no hubiera cometido esos errores de bulto.
La recomiendo para los amantes del género del suspense, a las personas que les guste la música clásica, y a los que quieran pasar un buen momento olvidandose del guión de la película.
Otro de los aciertos es su corta duración, ideal para lo que nos cuentan. Se agradece que no se intente alargarla, para hacer una película de 2 horas.