Los sueños, algo tan sumamente común, que es desconcertante hasta el punto de locura.
Paraje inhóspito dentro de nuestro ser, el cual visitamos todos los dias, algunas veces siendo nuestro paraiso perfecto, y otras nuestro infierno más macabro.
Christopher Nolan lo ha vuelto a hacer, a conseguido que veamos nuestros sueños con otros ojos, nos ha echo soñar sin estar durmiendo, nos ha demostrado que no hay tema impenetrable para su cámara, por ambicioso que parezca.
Ha hecho que nos quedemos sin aliento, que nuestro cerebro busque, a veces sin resultado, una explicación a lo que Christopher nos está proyectando.
Obra maestra de la cultura cinematográfica del siglo XXI, que lleva el thriller a otro nivel, a otra dimensión, la dimensión antiguamente virgen de los sueños, y lo hace como solo él sabe hacerlo, de una manera espectacular.
Thriller de ensueño, profundo y agonizante que no nos deja indiferentes,sino que nos cambia para siempre, ya nunca veremos nuestros sueños de la misma forma.
Si eres un amante del cine y el triller esta película te va a fascinar, no solo recomendada sino obligada, no te arrepentirás.