La mejor escena la del comienzo. Una "Jauría humana" asustando y acosando a un pobre puma en medio del desierto de Nuevo México. Solo que la jauría está compuesta por un puñado de adinerados aristócratas llegados de Centroeuropa que celebran con champán la pieza cobrada en un picnic a la usanza versallesca.
Los vaqueros que los sirven y acompañan se mueven entre la risa y las ganas de ligarse a las bellas damiselas. Alguno lo consigue.
Luego están los apaches que protestan por ver invadidos sus cazaderos, y el coronel Shalako (Connery) que acude en ayuda de los aristócratas esperando cobrarse alguna pieza entre las damas.
Western que toca un tema original, un safari europeo en el desierto, con mucha aventurilla y poca sustancia.
Guion bastante simple donde lo único relevante es conocer el momento en que Shalako le birlará la condesa Irina Lazaar (Bardot) al barón Frederik (Eyck), "Un pobre estúpido vestido de payaso".
Realización bastante corriente que se desentiende del análisis de los personajes para centrarse exclusivamente en las aventuras, pero sin que exista verdadera tensión dramática en ningún momento.
Interpretaciones que no pasan de correctas teniendo en cuenta la categoría del elenco. Mejor Connery que Bardot pese a su indiscutible exuberancia.
Los apaches mera comparsa. "Total, era un indio el que ha muerto. -Era un hombre".
Lo mejor los paisajes del desierto almeriense con escenarios bien elegidos y muy bien fotografiados. Poca cosa.
Wester flojo pero que al menos entretiene.