Tercera colaboración (hasta el momento) del director Wright con el cómico Simon Pegg. Lamentablemente este equipo sólo consiguió un producto interesante con la parodia de las "buddy movies" HOT FUZZ (penosamente traducida al español como ARMA FATAL). Ni la más conocida ZOMBIES PARTY ni esta cinta actual sobre invasiones de robots replicantes en un pueblecito de comarca llegan a interesar ni entretener lo que deberían.
Porque lo mejor de esta película es su primera media hora, con la presentación de personajes y el inicio de ese maratón alcohólico de regreso al pueblo de la infancia. Tras esto, cuando la peli entra en materia, pierde mucho fuelle y se pierde entre ruidosas escenas de acción y lucha no muy llamativas y un desarrollo argumental con interés decayente. Ni siquiera los esperables guiños cinéfilos del género de la ciencia-ficción de serie B acuden al rescate, salvo el evidente acogimiento argumental de LA INVASIÓN DE LOS ULTRACUERPOS, de la que toma un 70%.
Una pena porque el film cuenta con secundarios de ciertas garantías (Freeman, Pike, Brosnan), pero todo se desinfla por no encontrar un guión más atrevido y chispeante que te deje expectante ante lo que pueda pasar.