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España España · acnamalaS
Voto de josh710:
1
Animación. Fantástico En este álbum visual de anime, un misterioso conductor se adentra en un infierno post-apocalíptico hacia un enfrentamiento brutal con dos monstruosos oponentes.
6 de octubre de 2019
1 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Diez minutos. Ni uno más. No he sido capaz de soportar más tiempo viendo este... No sé muy bien cómo definirlo. Diría que es un extraño batiburrillo de conceptos e ideas robadas de mil sitios diferentes conectadas porque sí y de mala manera para tratar de alargar la cosa hasta que el señor Sturgill Simpson se quedó sin canciones.

Hasta dónde yo he llegado se producen tres escenas:

En la primera seguimos a un coche negro (mezcla del coche fantástico y el de Toretto) que recorre una serie de lugares destruidos por, presumiblemente, una guerra nuclear. Las imágenes visuales son increíbles y la música es excelente. Parece un videoclip de Daft Punk que se les has salido un poco de presupuesto. Genial.

Genial, claro, si no fuera porque la segunda rompe por completo con lo visto hasta el momento. El escenario se traslada a un dojo japonés en el que nos encontramos con unos monjes tradicionales compartiendo templo con un samurái afroamericano (calco exacto de Afro, de la serie Afro Samurái) y un texano que forja katanas al ritmo de la música (esto ya es muy raro, lo sé, pero esperad porque sigue). A continuación aparecen unos hombres trajeados armados con revólveres del calibre... que sé yo... por lo menos 150. Y sé que suena exagerado, pero es que las balas les revientan la cabeza a los pobres monjes como si se las hubiera llevado por delante un tanque a 200 km/h. Lo sé. Sé que parece que ahora exagero todavía más, pero si no me creéis podéis verlo vosotros mismos. Aunque ya os digo (así directamente, por si se os da regular leer entre líneas) que no aconsejo ver esta ¿película? ni aunque os paguen dinero. Porque luego la cosa mejora con un humo azul que mata a los pocos que quedaban vivos tras la masacre. Un humo azul que fuman los hombres trajeados y que te deja como a Frodo con veneno de Ella-Laraña. Muy chungo y muy aleatorio. La escena termina con un superviviente encontrando la carnicería y un plano de su cara que promete venganza.

La tercera y última escena que me he obligado a ver nos vuelve a situar con el coche negro. Y ahora vemos que el conductor lleva una máscara estilo Yoshimitsu, así que parece que la historia va a tener algo de continuidad. Pues no. Porque resulta que bajo la máscara se oculta una mujer que hace las siguientes cosas en, aproximadamente, dos minutos: primero dispara a un tren con pinzas; luego derriba al mencionado tren con pinzas saltando sobre el techo (sin bajar del vehículo) y éste explota; después se enfrenta a dos carrozas-robot-gigante (totalmente calcadas de Batman Ninja, otro engendro de película de curioso y currado estilo visual, pero con nula trama y cero calidad narrativa) pilotadas por uno de los hombres trajeados y una bruja de las del estudio Ghibli hasta arriba de phoskitos; más tarde se coloca delante del coche negro (sí, delante, no encima; no preguntéis) y asesina con katanas a un grupo de gente al que le va el bdsm; acto seguido da saltos como un canguro para esquivar trescientos misiles lanzados por el hombre trajeado y, por último, decide que es el momento perfecto de ponerse a bailar interpretando una coreografía muy (totalmente) inspirada en "Thriller" de Michael Jackson...

...
...

Llegados a este indescriptible momento, como comprenderéis, decidí quitar tamaña porquería para evitar desarrollar múltiples problemas mentales.

Si leer esto anima a alguien a ver Sound & Fury no era (para nada) mi intención. En serio.

Y nada. Solo eso. Necesitaba desahogarme. Creo que ya.

Nota final: 0
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
josh710
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