Ésta es, sin dudas, una de las mejores películas que he visto en los últimos 20 años de mi vida. Lo digo en serio. Y está entre las tres primeras. Nadie se esperaba la magnitud de este largometraje. Batman Begins ya era de 10 (tal y como la voté) por sí sola, superando a muchísimas películas de superhéroes y por supuesto haciéndonos olvidar a Tim Burton y más aún a Joel Schumacher. Christopher Nolan había creado una de las mejores películas del género y una de las más importantes de aquella temporada. Amén. Pero esta segunda película es una unidad por sí sola (puedes verla habiéndote perdido Begins) y es una historia adulta, veraz, compleja (pero se entiende y se sigue a la perfección), decorada con interpretaciones inolvidables y momentazos impresionantes pocas veces vistos antes. Una película que no sólo trata el tema de superhéroes y se acabó. Es más profunda, más desarrollada. Juega con todas sus bazas y las aprovecha a las mil maravillas. Y no sólo es un entretenimiento/espectáculo perfecto. Es una película maestra en todos los sentidos.