Thriller aceptable en donde un médico luego de recibir un paciente con síntomas altamente desconocidos comienza a investigar el origen de su afección, produciéndole alteraciones de todo tipo en su apacible vida. A partir de allí se comenzará a desarrollar un entramado de mentiras y desapariciones que involucran a numerosos vagabundos que solo se relacionan por no tener familia y estar en buena forma física. Hay persecuciones, disparos y algo de suspenso, pero el principal inconveniente es que Hugh Grant no da la talla para ese papel (no porque no tenga capacidad, sino porque está mas relacionado a la comedia romántica que a este tipo de protagonismo), Gene Hackman, siempre cumple, por mas que aquí sea un personaje altamente secundario con importante incidencia en la trama, le alcanza para sobresalir sobre el resto, Sarah Jessica Parker en un rol que no aporta demasiado y un David Morse como siempre correcto completan el elenco. Sin ser una gran película puede verse sin problemas.