Uno a veces se harta de ver films sobre robos y atracos a mano armada con los mismos tópicos y obviedades, que con los años y a la falta de originalidad de los guionistas se repiten seguido, en pos de ganar en la taquilla. Aqui el tema no es original, tiene elementos vistos en otras pelis. Pero contando con un director de primera, un elenco soberbio, unos rubros técnicos impecables y un guión que escapa a estereotipos del género, se convierte en un inteligente y elegante film, además de ser muy entretenido.
Cuando un banco es asaltado por 4 delincuentes aparecen en escena tres personajes que llevan a cabo la acción e intenterán develar los misterios de este robo, para nada común. Uno es un policía que acarrea una causa judicial, el otro es el calculador e inteligente asaltante y el ultimo es una abogada codiciosa que defiende intereses bien guardados del dueño del banco.
Contando con una intriga y una acción perfectamente orquestadas y con interesantes reflexiones sobre el poder y la codicia, el film nunca se torna aburrido y se vuelve más cerrado con el correr de los minutos, haciendo a uno sacar conclusiones previas al sorprendente final.
La mágnifica dirección de Spike Lee se nota, tanto en la elección de rubros técnicos excelentes, a destacar la fotografía y en especial en el maravilloso elenco: a Denzel le queda justo su rol, su capacidad interpretativa es insoslayable; Clive Owen le aporta matices y verosimilitud al asaltante y es un placer absoluto ver a Jodie Foster en su papel de auténtica perra codiciosa, sus momentos son memorables. En pequeños pero esenciales roles estan los grandes Chritopher Plummer y Willem Dafoe y el ascendente actor Chiwetel Ejiofor.
Elegante, inteligente y entretenido, que mejor programa para el fin de semana...