Terrible y dantesco film sobre una pequeña historia de un judío obsesionado con enterrar el cadáver de su "hijo" en plena rebelión de los "Sonderkommando" de Auschwitz durante 1944. Inspirada ciertamente en films como "La Zona Gris"(insuperable), Nemes opta por contar el 85% de la historia "cámara en mano" que no para de temblar, siguiendo las evoluciones de su protagonista Saúl, en tanto se aprecian destellos de los combates de la rebelión de algunos prisioneros y del personal judío destinado a los crematorios, haciendo frente a los guardias nazis. Y es precisamente esa forma de rodar la que consigue incomodarnos, incluso marearnos, en la butaca, centrándose en el pobre judío, pero haciéndonos intuir en los márgenes del encuadre todos los continuos horrores que se suceden...a pesar de todo, la tenue escena final nos da alguna esperanza.