La cosa es francamente irregular,
por un lado reflexiones sobre el amor y la pareja, que es lo que quiere cada uno y lo que luego consigue. Una americana clásica que tiene una vida conservadora y desea en sus entrañas una vida salvaje, otra que no sabe lo que quiere y si lo que no quiere y en medio una pareja que se ama pero que no se aguanta. ¿Quien no conoce a gente como esta?. Eso es lo mejor de la película y lo que la dota de mas profundidad de la que puede aparentar su tono de comedieta.
Por otro lado un publireportaje vergonzante e indigno de Allen, con una selección musical espantosa, uno espera que en cualquier momento aparezca el cartel publicitario de "Ven a Barcelona, Barcelona es poderosa, Barcelona tiene poder...". y ante las concesiones de cara a los patrocinadores el conjunto se resiente y pasa por momentos que no parecen de Woody Allen, una lástima porque la historia tenía los ingredientes para hacer una película notable y no pasa de aceptable.