Extraño mejunje entre "2010", "Horizonte final", "Misión a Marte" y "Naves misteriosas", todo ello troceado, batido en una túrmix y servido con una pajita. El personaje de Cillian Murphy es el centro de todas las desdichas que ocurren en el filme y el resto de secundarios solo sirven para tener muertes más o menos creativas.

El filme, de bella factura, cambia conforme avanza el metraje, partiendo de un filme realista de sci-fi, a cine épico espacial - de esos que algún personaje debe hacer un sacrificio máximo - y finalizando con una especie de cine de terror chungo con monstruo o similar, en un giro de la historia metida a calzador y que sin duda es lo más absurdo y delirante de este irregular film, que pretende picotear en todos los platos del buffet y, al final, coge una indigestión.