Se suele decir que el libro es mejor que la película. En este caso sería una blasfemia afirmar lo contrario. El 'Orlando' de Virginia Wolf se ganó hace tiempo un lugar en el olimpo de la literatura universal. Esta película simplemente renueva los votos a través de un hermosísimo mosaico de personas, escenarios y lenguajes artísticos y cinematográficos.

Entonces, ¿se trata únicamente de un homenaje en forma de ejercicio estético? Al contrario, aquí la forma y la pleitesía son solamente un vestido llamativo. 'Orlando, My Political Biography' es una herramienta de comunicación disfrazada de arte. Y no lo digo como un defecto, sino como una ENORME virtud.

Paul B. Preciado ha hecho una película muy asequible sobre una teoría no siempre entendible. Es admirable y sumamente gratificante que existan trabajos así, tan honestamente políticos y tan descaradamente bellos. No es nada fácil ser divulgativo y pedagógico sin renunciar ni un ápice a la calidad artística. ¡Chapeau!