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Voto de Maldito Bastardo:
13 159
Thriller. Terror
Basada en una historia de M. Night Shyamalan. Un día cualquiera, cinco personas, que no se conocen, se quedan atrapadas en un ascensor de un gran edificio de oficinas. Muy pronto comienzan a suceder cosas extrañas y, poco a poco, se dan cuenta de que uno de ellos no es quien dice ser: es el mismísimo Satanás.
20 de febrero de 2011
10 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
¡Ay, el diablo no los cría pero ellos se juntan! Y va y los arrejunta…
Comienza fuerte con:
«Siempre estate alerta porque tu adversario el Diablo anda siempre como un león buscando alguien a quién devorar.»
Pedro 5.8
A Pedro se lo comió uno de León porque el Diablo es listo y meticuloso, tanto, que seguramente mande una maldición a los responsables de esta película por dejarle tan mal. Él quiere que lo vean pero ni va un reality y no quiere salir en “Callejeros” para inundar los vídeos y parodias en youtube. Lo suyo es que se hable de ti… pero con “Devil” se hablará poco y encima mal.
El pretendido terror por lo amorfo y maléfico se evapora como un pedo. Eso sí, este huele cantidad… y no precisamente a azufre. Luego sale una voz que te cuenta que si su mamá le contaba cuentos… y uno piensa… ¿¡esto no lo hemos visto antes!? ¡¡En “Legión”!! O lo que es lo mismo: ¡¡una de las peores películas 2010!! También, por cierto, había religión pero precisamente el demonio no juntaba a los protagonistas sino una legión de posesos y ángeles del infierno al ritmo de las Spice Girls.
Es cierto que el director invertido y controvertido como Shyamalan tiene ideas brillantes pero aquí se le va un mediometraje a un sataniencaje… Y la ‘idea’ buena de la que se ha hablado es simplemente una revisión de “Los diez negritos” pero con la mitad y en un ascensor. Poca crítica social en un mundo de ladrones y gente mala que subsisten bajo la alargada sombra y control demoníaco. “Devil” es invertida, con ciudades del revés, puentes del revés y fe del revés. Parece un chiste en el que se juntan un alemán, un francés y un español… Aquí tenemos a la doble de Angela Merkel, un imitador low-cost de Raj Koothrappali, un segurata violento y ¡afroamericano!, una fan de Nirvana y el chico macarra de-todas-las-películas-norteamericanas. Todos, por supuesto, más malos que Ramoncín (faltaba el español del chiste). Es más, si yo fuera el diablo me personaría allí como Ramoncín para hacerles una versión de “Come as you are” y que todos acabarán como Kurt Cobain. ¿No hubiera sido más fácil que esta ración de relleno de terror barato?
Comienza fuerte con:
«Siempre estate alerta porque tu adversario el Diablo anda siempre como un león buscando alguien a quién devorar.»
Pedro 5.8
A Pedro se lo comió uno de León porque el Diablo es listo y meticuloso, tanto, que seguramente mande una maldición a los responsables de esta película por dejarle tan mal. Él quiere que lo vean pero ni va un reality y no quiere salir en “Callejeros” para inundar los vídeos y parodias en youtube. Lo suyo es que se hable de ti… pero con “Devil” se hablará poco y encima mal.
El pretendido terror por lo amorfo y maléfico se evapora como un pedo. Eso sí, este huele cantidad… y no precisamente a azufre. Luego sale una voz que te cuenta que si su mamá le contaba cuentos… y uno piensa… ¿¡esto no lo hemos visto antes!? ¡¡En “Legión”!! O lo que es lo mismo: ¡¡una de las peores películas 2010!! También, por cierto, había religión pero precisamente el demonio no juntaba a los protagonistas sino una legión de posesos y ángeles del infierno al ritmo de las Spice Girls.
Es cierto que el director invertido y controvertido como Shyamalan tiene ideas brillantes pero aquí se le va un mediometraje a un sataniencaje… Y la ‘idea’ buena de la que se ha hablado es simplemente una revisión de “Los diez negritos” pero con la mitad y en un ascensor. Poca crítica social en un mundo de ladrones y gente mala que subsisten bajo la alargada sombra y control demoníaco. “Devil” es invertida, con ciudades del revés, puentes del revés y fe del revés. Parece un chiste en el que se juntan un alemán, un francés y un español… Aquí tenemos a la doble de Angela Merkel, un imitador low-cost de Raj Koothrappali, un segurata violento y ¡afroamericano!, una fan de Nirvana y el chico macarra de-todas-las-películas-norteamericanas. Todos, por supuesto, más malos que Ramoncín (faltaba el español del chiste). Es más, si yo fuera el diablo me personaría allí como Ramoncín para hacerles una versión de “Come as you are” y que todos acabarán como Kurt Cobain. ¿No hubiera sido más fácil que esta ración de relleno de terror barato?
