Primer título acreditado para dos grandes directores del exploit Jack Hill y Stephanie Rothman que codirigen esta serie B sobre artistas locos, vampiros y asesino de mujeres para la American International Pictures.

La película disfruta divirtiéndose a costa del arte moderno y sus teorías de innovación o con su intento de mimetizarse con los conocimientos adquiridos en el siglo XX, de este modo estos beatniks crean la pistola cuántica o Sid Haig utiliza a una modelo como utensilio con la cual pintar. El exploit reclama su arte atacando con humor al arte culto.