Es una película que me ha resultado bastante plana. Que no predecible. Aunque si uno lee el resumen que aparece en la parte de atrás de la caja, casi que no tiene que verla entera para saber a qué se van a dedicar los 90 minutos escasos de metraje.
Una vez que echa a andar ya uno sabe cuál será el siguiente paso, eso sí, no cabe duda. Es como una bola de nieve que no se puede parar porque el camino está marcado.
Lo de los saltos temporales sin avisar más que por una mera y triste mención de uno de los personajes en cada caso es un tanto desconcertante. Que pase un año de citas y que uno se entere por una mera frase en la que se dice la palabra año es algo triste.
Para pasar el rato, pero tampoco mucho pues por suerte no es larga. No es muy grande ni muy pequeña, es mediana, tristemente mediana.