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España España · MADRID
Voto de ELZIETE:
6
Drama. Romance Un matrimonio inglés viaja a Italia para vender una villa que ha heredado cerca de Nápoles. Al alejarse del ambiente londinense y encontrarse en un paisaje y en un mundo ajenos, la pareja experimenta sentimientos olvidados, como los celos y el resentimiento. (FILMAFFINITY)
25 de diciembre de 2017
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Estamos en 1954. El cine lleva ya más de medio siglo contando historias sobre la vida, la muerte, el amor y el desamor y cualquier otra faceta existencial que a uno se le pueda ocurrir. Por lo tanto y a mi juicio otros han contado mejor esta historia de relaciones y todo lo que conlleva (pasión inicial, desengaños, descubrimiento de las diferencias y de la realidad, miedos a la soledad, los hijos, la muerte...). Historia por otro lado de tintes autobiográficos del propio Rossellini con su esposa La Bergman en el ecuador de su relación.
El cine es arte, con lo cual el espectro de sus manifestaciones es tan infinito como la creatividad de cada autor. Pero no hay que olvidar que en su origen y esencia es un arte popular, donde por un nikel al alcance de la mayoría uno vive otras vidas, se evade de la realidad y goza de la katarsis innata en las historias desde tiempo inmemorial.

En la evolución de ese arte popular Rosellini tiene un papel destacado. "Su" neorrealismo abrió una puerta a caminos diferentes y aquellos que en la Francia de mediados del siglo pasado empezaron a diseccionar e intelectualizar el arte de las imágenes en una pantalla dijeron que "Viaggio in Italia" es la primera película moderna. Lo dijeron esos mismo que se autoconvirtieron así mismos con sesudos razonamientos en "críticos" poderosos capaces de tocar con la varita de autor a unos y a otros definiendo el bien y el mal y apostando por una nueva ola que como toda nueva ola siempre acaba muriendo en las playas del tiempo y la historia. Libreme Dios (que es lo mismo que decir Billy Wilder) de renegar de todo lo positivo que supuso esa época, esos profetas y su biblia los Cahiers du Cinéma en la puesta en valor del arte cinematográfico. Pero la única certeza es que no existen certezas. Muchos directores de la industria norteamericana del entretenimiento cinematográfico descubrieron encantados con gozo y asombro que eran autores y no meros profesionales contadores de historias al servicio de productores poco escrupulosos. Otros igual de autores lo pagaron con el ostracismo al no ser tocados con la varita divina.

Así pues y dicho lo anterior. "Te querré siempre" goza de unas virtudes conceptuales que contrastan con "el coñazo de película que es". Vale, ya lo he dicho. Asi es que bienvenida "la grieta" por la que se coló la modernidad en el cine y nada más y nada menos.
Rosellini quería rodar una adaptación de "Duo" de Collette y ya en Nápoles se encontró con la chapuza a la italiana de que los derechos no le pertenecían. Improvisó unas pocas páginas, tiró de su vida personal se olvidó del neorrealismo, mezcló a actores profesionales "a su aire" con un bonito recorrido turístico y documental por Nápoles al que el maestro supo convertir en metáfora de la psique de su protagonista al igual que esos insufribles planos de los protagonistas en los coches. Que para el que no lo sepa, no son coches, sino que están cargados de un simbolismo profundo, metafísico y hacen las veces de cámara por la que el cine y la realidad se confunden. El público de la época poco dado a la crítica sesuda probablemente se durmió a los 20 minutos y la cosa fue un fracaso popular. El rídiculo e increible final tiene una explicación sobre el sentido circular de la vida que vaya ud. a explicárselo al común de los mortales y de paso abochorneslé por ser tan inútiles de no entenderlo. Acudan al articulo del recientemente  fallecido director frances Jacques Rivette en el nº 46 de abril del 55 de Cahiers du Cinéma donde todo queda perfectamente explicado (es ironía).

Howard Hawks, al que precisamente los apóstoles de Cahiers ensalzaron decía que la primera y última regla en el cine era: no aburrir. A mi este viaje por Italia me ha aburrido mucho de un director que por otro lado me encantan "Roma...." , "Paisa", "Europa 51"...
Al final todo va a estar en las sabias palabras de otro de los dioses del Olympo, John Ford: "Hago películas del Oeste". 

cineziete.wordpress.com
ELZIETE
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