Que la todopoderosa DISNEY-MARVEL apueste con sus blockbuster mundiales por la integración y los valores afroamericanos con "Black Panther" o el empoderamiento femenino con la que nos ocupa siempre se agradecerá y será un punto a su favor. Otra cosa es el resultado cinematográfico de los productos resultantes, que a mi juicio no dejan de ser en estos casos discretos.

Al Capitán o Capitana Mar-Vell le ha precedido una abrumadora campaña de tono feminista al rebufo del éxito conseguido por su rival DC con Wonder Woman. Tanto una como otra se quedan en ese sentido cortas en relación con sus expectativas." La Wonder" al menos se la jugó ella solita. A "la Mar-Vell" le han colocado al lado a un peso pesado como Samuel L. Jackson. Como si no acabaran de fiarse de una Brie Larson que se hace de sobra con el personaje que apareció en los cómic de la mano de Roy Thomas y los lápices de Gene Colan como la oficial de la fuerza aérea Carol Danvers en el 68 y se hizo con el título de Ms. Marvel en el 77.

Añoranza de los 90, mensaje feminista (está muy bien eso de que hay que levantarse y seguir luchando por mucho que te caigas o te tiren), una cierta narrativa diferente a la que se nos tiene acostumbrado con el tema de los orígenes y trazas de  humor y tono con tufillo Disney.  Salen Jude Law y La Bening justificando aquello de "y con..." en los créditos y poco más de una historia entretenida cuyo mejor acierto es no tomarse en serio a sí misma.

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