Dennis Hopper nunca ha sido santo de mi devoción. Siempre hace papeles de malo maloso, pero a mí me parece más un pringado que un mafioso. Reconozco que algo gana en versión original y que los dobladores que ha tenido no han sabido cogerle el puntillo al actor, pero aún así no me convence.

Esta película es un poco lenta. Se duerme en los laureles al principio, con una introducción a la trama muy pausada. La parte más interesante es la de los asesinatos por encargo. Luego en la última media hora lo embrollan todo sobremanera y la historia se vuelve subrealista. El final te deja con la mueca torcida.

No le veo el mérito a esta película como para tener una nota media tan alta. Cualquier largometraje de gangster de los 50 tiene una trama más elaborada y mayor atractivo estético.

Tampoco le veo méritos para ser una peli de culto. No es bizarra, no es original y rompedora, no es brutalmente violenta, no hay cosas que interpretar libremente,... Vamos que es de lo más normalita, muy de andar por casa.

Pero sobre gustos no hay nada escrito...