'Saw' puso de moda las películas donde una voz en off obliga a una gente atrapada a hacer barbaridades. Desde entonces ha habido decenas de títulos copiando esa estructura, y sin realmente aportar nada especial. Esta película es una más, donde casi un centenar de empleados de una multinacional son encerrados en el edificio donde trabajan para que se maten unos a otros, como deja claro la cartelería.

Me hace gracia que tachen la medida de "experimento" y se queden tan anchos. En el método científico, se parte de unas hipótesis, y se hace el experimento para corraborarlas, para descartarlas o para matizarlas. Evidentemente, aquí no hay nada de eso. Esto es violencia gratuita, por mucho que quieran adornarlo.

Aunque se deja ver, me gusta más 'Mayhem', del mismo año pero con más coherencia en la trama.