La hermanas Magdalena es una buena película crítica aunque puede ser un poco evidente y fácil pero independientemente, necesaria.

La película tiene una doble lectura, la crítica a las Hermanas de la Magdalena y una crítica al mundo de la Iglesia.

¿Es necesaria una crítica tan directa?, esa es la pregunta que me planteo cada vez que la veo, pues su presentación tan directa produce en el espectador una furia real, un odio hacia las personas vestidas con sotana y hábitos, una crítica poco objetiva.

La crítica a las hermanas es necesaria y por fin alguien se atreve a hablar de una manera directa y sin ningún escrúpulo, los tiempos han cambiado y a la Iglesia se le da lo que se merece.
Sus obras buenas y caritativas son reales pero sus obras de terror han sido y son también reales, en este caso se mencionan a las Hermanas Magdalena pero todo lo que ha hecho y hace la Iglesia.

Conozco a unas hermanas religiosas muy de cerca y he podido ver la “mierda” que también se cuece dentro de una “comunidad”, este tipo de organizaciones van en contra de la madurez personal.

Todo lo que se muestra es real, se muestra demasiado evidente pero todo, por desgracia, es real.

La película critica al mundo de las monjas pero al mundo directo de la Iglesia y sus trapicheos que se cuecen, y cada vez más evidentes, película necesaria.

A parte de la crítica, la película es muy buena, se ve muy bien y en ningún momento resulta aburrida, en ningún momento cae la intensidad de la historia, está bien actuada y bien dirigida, quizás sea también porque el espectador está esperando escenas morbosas, porque en el fondo es lo que tanto nos gusta...

Otra cosa importante e importante es el retrato de esa ignorancia que caracteriza a la triste sociedad que sigue a la Iglesia con una tremenda devoción, ese retrato de la ignorancia que busca siempre la Iglesia.

Una película arriesgada, directa pero necesaria.