Haz click aquí para copiar la URL
España España · san sebastian
Voto de Izeta:
7
Cine negro. Drama. Thriller Un agente federal viaja hasta un país de Sudamérica para localizar a un peligroso grupo de contrabandistas dirigidos por un acaudalado y mujeriego norteamericano. Una vez allí se sentirá irremediablemente atraído por la esposa de uno de los jefes de la organización criminal. (FILMAFFINITY)
9 de febrero de 2022
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si el cine negro sigue ejerciendo una poderosa fascinación en los espectadores de todas las épocas, no es sólo por el atractivo que desprenden los archiconocidos y queridos elementos que la conformaron y que ya no podemos despegarlos de nuestro corazón, esto es, ya saben, esa voz en off, fotografía oscura, ambientes sórdidos, escenas nocturnas, etc..., sino, a mi humilde entender, por ser el género encargado de radiografiar los más bajos instintos humanos, por fotografiar toda esa parte de nosotros mismos que más detestamos y que mantenemos oculta en lo más profundo de nuestras conciencias. Nuestras debilidades, mezquindades y cobardías. Nuestros deseos más censurables y ambiciones más vergonzosas.

Supongo que todos alegaréis que muchos otros géneros exploran también esa vertiente del ser humano. El western, el drama, el thriller...Pero no es así exactamente. Estos géneros, se diferencian de aquel por utilizar ese tema como un ingrediente más de él, nunca como motivo principal y, casi, único.
Y digo esto porque me parece que eso es lo que le falta a esta película para alcanzar unas cotas más altas en lo que podríamos presumir por su magnífico reparto.
Un cuarteto de lujo, cuyos personajes, sin embargo, no consiguen elevarnos a las más altas cimas de la miseria por culpa de los responsables de un guion que dibuja unos personajes excesivamente rígidos, poco matizados y bastante previsibles, exceptuando a esa delicia de personaje, perfectamente interpretada por el genial Laughton, que, una vez más, va a acaparar toda nuestra atención.
Porque yo siempre he pensado que Laughton no solo era un actor portentoso, no. Es que tenía un olfato privilegiado para detectar en los guiones que le presentaban al personaje más complejo, el que más aristas pudiera ofrecer o el que más matices ofreciera, al margen de que su papel en la cinta fuera grande o pequeño.
Aquí encarna a un tipejo miserable y enfermo, bastante mezquino, egoísta y traicionero pero con una misión impepinable en la vida; escapar del lugar donde se encuentra atrapado para salvar su propio pellejo.

Robert Taylor, Ava Gardner y Vincent Price, nos van a ofrecer unas actuaciones más que solventes indudablemente. Pero no nos van a sorprender. De principio a fin sabremos a qué atenernos con ellos sin que se muevan un milímetro de los patrones de conducta de un esquema prefijado y bastante acomodaticio.

Y el argumento, en realidad, es lo de menos.
Un agente federal ( Taylor), es enviado a un país del trópico para que investigue sobre una red de contrabando de excedentes de guerra, en este caso, motores de avión, no sin antes señalarle a los principales sospechosos que debe investigar; un matrimonio norteamericano ( John Hodiack y Ava Gardner).
Entre Taylor y Gardner inmediatamente surgirán chispas pero Gardner, aquí, de femme fatale nada, si acaso, un amago de ella, aunque siempre es un placer admirar su portentosa planta.
Vincent Price, por su parte, será el antagonista perfecto de Taylor y, junto con él, protagonizará las dos escenas por las que realmente merece la pena ver la película. La escena de pesca y la traca final. Emocionantes y originales.
Buenos diálogos, pero excesivos, poca acción. Mucho calor y humedad. Echaremos de menos la refrescante lluvia y el frío de Chicago. A mí, Charles Laughton, siempre me da mucho calor. ! Cómo tiene que tener los pies!. ! Qué dolor!
Izeta
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow