Muy buena. Basada en una obra de Murakami, un delirio estupefaciente que sin ser redondo te mantiene pendiente durante toda una peli que, sorprendentemente, se caracteriza precisamente por la "ausencia" de guión. No es nada fácil rodar tal cosa, y eso la hace subir de un aséptico 6 (lo que se merecería), a un más que digno 8, que es la nota que la he puesto.

Reconozco que soy bastante imparcial porque soy un admirador del cine coreano contemporáneo (gracias a Park Chan-wook, Na Hong-jin, Kim Jee-woon, etc...). Me admira la honestidad de sus producciones en todas las dimensiones, su escrupulosa realización técnica, y esa mezcla de respeto e irreverencia por los clásicos del Cine (de Hollywood especialmente, aunque no es difícil detectar resonancias europeas también). Nunca son películas fáciles, pero es fascinante la manera en la que transmiten que por muy alejadas (aparentemente) que estén nuestras culturas, el ser humano se rige por unos mecanismos que son en esencia globales e intemporales

No es una película fácil de recomendar, es difícil que guste al espectador medio que espera ver un thriller o un drama. Pero la recomiendo, total, dos horas y media pasan en un plisplás.