Aunque me sorprende que el Dafoe se haya prestado a esto (y ya puestos tal plantel de estrellas como el Hawke o Sam Neill que es un tipo efectivo pero que siempre me ha gustado bastante) puede decirse que el resultado se salva como poco por su originalidad y ser una de las pocas películas de vampiros de temática variopinta y ni por asomo convencional ni vegetariana (gracias a Dios).

Daybreakers es terrible, no porque acojone o sea mala, sino por el impensable escenario que plantea: un mundo en donde se vive de noche y los pocos que aún lo hacen de día son cazados para servir de ganado a la mayoría vampírica. Tan brutal como un puño en la mandíbula y tan primaria gracias a sus momentos auténticamente gore.

Pero lo malo es que no engancha, se ve que podría haber dado más de si pero no lo han sabido hacer mejor. Tiene escenas que prometen pero son destellos, y alguna que otra tontería puede llegar a ser irritante, una pena.

Aún así sangriento entretenimiento a tener en cuenta.