Después de ver MEGALODON, queda la sensación de que uno ha visto lo que realmente espera, película con animal prehistórico gigante, con el omnipresente JASON STATHAM, con lo cual está todo dicho.
Esto no quiere decir que estemos ante un buen trabajo pero entretiene y eso ya es más que suficiente.
JON TURTELTAUB, es uno de los artesanos de la industria con mas oficio pero que carece de sello propio, aún así es solvente en su puesta en escena y el director de películas tan taquilleras y divertidas como EL APRENDIZ DE BRUJO Y LA BUSQUEDA, quizás abuse de los efectos digitales y el croma en el caso que nos ocupa pero al final logra tenernos sin pestañear durante todo el metraje.
Al ser una coproducción con el emergente mercado chino, la película debe aportar la cuota de actores de ese país además de estar situada la acción en aquellas latitudes, chirrían ciertas cosas como el humor forzado ya tópico y típico en la actualidad en toda película con héroes y acción que se precie.
Porque el bueno de STATHAM, es casi como un superhéroe solo que en esta ocasión en vez de repartir mamporros en tierra firme lo hace en el mundo marino con unos antagonistas como pulpos y tiburones gigantescos.
Las pelis con tiburón son un propio subgénero desde la referencial obra maestra de SPIELBERG, pero para mi gusto me quedo antes que con esta, con títulos mas recientes como OPEN WATER o INFIERNO AZUL.