El contenido de esta pobre película se puede resolver en tres planos: en el primero tu me pegas 22 tiros en el segundo por venganza yo te los pego a tí y en el tercero no lo sé porque me quede frito de aburrimiento bastante antes del final.
Todo es banal, previsible, falto de interés y de ritmo. Los actores como robots sin emociones.
Ahora entiendo por qué tanta gente dijo aburrirse con la última obra maestra de Urbizu: porqué se alimentan de bazofias como ésta. Allá ellos.
Nota: le doy un 3 por si acaso en la parte final que no vi hubiese algo digno de salvarse, porque de lo que vi: cero patatero.