Estaba claro que después de dedicar varias horas de mi vida a series como Daredevil, Jessica Jones y Luke Cage, ver ésta que reúne a los tres personajes (más Iron Fist, pero viendo la nota media me la ahorré, y por lo que he podido intuir viendo este personaje en acción y su trasfondo creo que acerté) prácticamente era casi obligatorio, aunque fuera sólo por coherencia.

¿Y qué puede decirse de ella? Pues que reúne buena parte de las virtudes y los defectos de sus predecesoras, aunque de un modo suavizado. Hay personajes carismáticos, buenas coreografías de combate, una cuidada fotografía y un villano de lujo. Ni más ni menos que Sigourney Weaver.

Ahora bien, la historia es simple, lineal y bastante predecible. De todos modos gracias a que su duración se reduce a sólo 8 capítulos permite que no se haga del todo tediosa, si bien es cierto que el comienzo no es precisamente muy dinámico que se diga. Quizá el mayor aliciente de toda la trama sean las presentaciones entre protagonistas y la evolución de sus relaciones.

Por lo demás, una serie correcta, entretenida, pero llena de clichés y pocas sorpresas. Vamos, no muy Marvelous.