Haz click aquí para copiar la URL
España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
5
Terror. Thriller. Intriga Cuando John Halloran muere de un infarto, su esposa teme no cobrar la herencia. Escribe entonces una carta al resto de la familia anunciando que John ha tenido que viajar a Nueva York por negocios. Cuando se traslada a la casa familiar buscando un modo de quedarse con el dinero, descubre que la familia celebra un morboso ritual... Primer largometraje de Coppola. (FILMAFFINITY)
24 de febrero de 2023
0 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
49/20(20/02/23) Enternecedor film de terror de serie b, visto 60 años después de su estreno, tiene en su ingenuidad de mezclar elementos de otros films del tiempo, sobre todo del exitoso “Psycho” de Hitchcock, su gracia que despierta alguna sonrisa. Es la ópera prima de Francis Ford Coppola con 24 añitos, que en la década de los 70 explotaría como uno de los mejores directores de todos los tiempos con el díptico Homérico “El Padrino” & “El Padrino II”, “La Conversación” y “Apocalypse Now”, he visto su debut como afición cinéfila en escudriñar señales de lo que está por venir en los grandes cineastas en sus comienzos, y lo que me he encontrado es la nada en este sentido, esta es una película que solo me despierta inocencia, la de unos principiantes jugando a ser creadores del séptimo arte, recurriendo a mil y un tópicos, con personajes toscos, mal escritos, y esto atomizado por unas actuaciones penosas, ni siquiera Patrick Magee da empaque a su confuso rol. El bajo presupuesto se nota y mucho, filmada de forma ramplona, con una edición rústica.

La película es una anécdota en la carrera de Copola, de la el director reniega, un refrito de ideas lanzadas en un desarrollo abigarrado, que deriva en un slasher con un villano envuelto en la oscuridad que deambula por los jardines del castillo con un hacha asesina, donde se supone hay un gran secreto familiar, sumado al fantasma de una niña ahogada en el lago del jardín, y con ello debemos jugar al clásico ‘whodunit’, pero esto, al haber pocos personajes brilla cual sol en medio del desierto, para cuando se destapa la identidad del psicópata la Montaña ha parido un Ratón, y tampoco es que importen unos sosos roles, me da igual si viven mueren o les toca la lotería. Sus motivaciones son vagas, se comportan de forma extraña (o sin sentido).

La protagonista es Louise Haloran (Luana Anders), a quien vemos en la (ridícula) escena inicial discutiendo con su esposo, John (Peter Read), sobre una condición en el testamento de su madre rica que establece que Louise no obtendrá nada si John, que tiene un corazón débil, muere. En ese momento (Ja, ja, ja!!!), John sufre un repentino ataque al corazón y fallece. Louise tira su cuerpo en un lago, tras lo que viaja a la finca de Haloran en el campo irlandés para una reunión familiar y les dice que John está de viaje de negocios ¿?), y nadie se escama en la familia, entonces existían los teléfonos. Pronto, descubre que no es la única que tiene un secreto, cada miembro de esta familia parece torturado de diferentes maneras. La rica matriarca (Eithne Dunne) en particular está atormentada por la muerte por ahogamiento de su pequeña hija Kathleen hace siete años (tenía 13 años), y no dejará que nadie lo olvide. Además, hay un asesino con hacha acechando la propiedad, acompañado por la forma dormida de la propia Kathleen, que parece aparecer mágicamente cada vez que alguien está a punto de ser cortado en pedazos.

La cinta tiene sus picos en las secuencias de terror de los ataques del malo malísimo del hacha, como es el impactante primer ataque a una joven metida en el lago, claramente inspirado el montaje (al que se le ven las costuras en que los golpes no se dan en el cuerpo y la mujer se contorsiona por inducción del aire) en el ataque mítico de “Psycho” en la bañera”, con el añadido de una secuencia subacuática (colándonos de forma paranormal que es de noche, pero sin embargo la chica puede ver el fondo del lago ¿?) que también me recuerda indefectiblemente a otra de otro film clásico de terror como es “La noche del cazador” (1955) de Chales Laughton, cuando vemos a Shelley Winters amarrada en un auto bajo el agua; Hay otro ataque desproporcionado, donde el loco del hacha se convierte en Hulk destrozando un cobertizo de modo cuasi sobrenatural; Y todo desemboca en el rush final en una boda muy precipitada.

La atmósfera del film resulta agobiante, seguramente fomentada por la precariedad de medios que la hacen extraña de ver, donde Coppola para (seguramente) intentar dar sensación agobiante filma muchos primeros planos, pero esto no hace más que pretender ocultar artificiosamente las carencias.

Durante el rodaje del film Coppola conocerá a su esposa, Eleanor Neil, responsable de los decorados y de cuya unión nacerá otro eslabón artístico: Sofía Coppola.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow