Es una película que intenta combinar elementos de drama, thriller, erótico y crimen, pero no logra alcanzar el éxito en ninguno de estos géneros.

La película tiene una premisa intrigante y prometedora, pero el desarrollo de la trama es lento y confuso. El guion no logra mantener el interés del espectador y las escenas eróticas resultan innecesarias y vergonzosas en lugar de atractivas.

La actuación de Demi Moore es sobreactuada y a veces incluso incómoda de ver. Aunque el elenco cuenta con actores talentosos como Armand Assante y Robert Patrick, su talento se desperdicia en personajes poco desarrollados y carentes de profundidad.

El director Andrew Bergman no logra capturar la tensión y el suspenso que se esperaría de un thriller y la película termina cayendo en clichés y situaciones predecibles. Además, algunos de los giros de la trama son poco creíbles y carecen de coherencia.

Uno de los mayores problemas de Striptease es su falta de equilibrio entre la comedia y el drama. La película intenta incluir momentos humorísticos que no encajan con la atmósfera general y que rompen el tono de la historia.

En resumen, es una película decepcionante que no cumple con las expectativas. Su trama es confusa, su desarrollo es lento y su mezcla de géneros no funciona. A pesar de tener un elenco talentoso, la película no logra aprovechar al máximo sus actuaciones.