Ex-marido y ex-mujer en road movie para llegar a tiempo a la boda de la hija de ambos. El guión es totalmente de cine fantástico. Estamos ante una comedia si, por eso supongo que nos podemos tomar ciertas licencias. Lo que me parece un error garrafal es el personaje de Valerie. Alain (Dany Boon), es el único al que acabas cogiendo cariño, y con el que más te identificas, sobretodo por todo lo que tiene que aguantar de su ex. Cuando descubres como es el personaje Valerie (Valérie Bonneton), lo primero que te preguntas es ¿cómo es que este personaje le han dejado ir a la boda? Nada más ver cómo reaccionan los demás familiares cuando la ven, alguno huye literalmente. Y luego cuando descubre lo que ha hecho antes e incluso de lo que es capaz de hacer, no tiene ningún sentido que Alain no pare de darle oportunidades. En la mayoría de los casos un personaje así tendría una orden de alejamiento, y Alain no habría vuelto a hablar con ella nunca más. Nadie lo haría sabiendo como es. Su personaje es odioso no, lo siguiente. Podría considerarla incluso la mala de la película. Por eso, no me creo esta película, ya que el personaje de Valerie al ser tan cabron pegaría más en una comedia negra, más que en una comedia de este estilo. Rozamos casi “La guerra de los Rose”. Por lo demás, aunque son casi 90 minutos, se te hace bastante lenta. Y Dany Boon, aunque para mi es lo mejor de la película, no es el Dany Boon que uno se espera. Aquí solo le tenemos de actor y se nota que no le han dado tanta libertad como en otras películas, digamos que está mucho más contenido, pero eso es lo que hace que su personaje acabe siendo soso. Se queda en una “road movie” más, no da nada nuevo al género.