Efectivamente nostalgia es lo que una persona que haya disfrutado del mundo de los pokémon sentirá al ver esta miniserie. Todo cuidado hasta el más mínimo detalle, al milímetro, queriendo ser fiel al videojuego desde el minuto uno hasta los créditos finales.

Muchas personas critican la brevedad de la serie, que te deja con ganas de mucho más, con la miel en los labios, pero señores, vamos a valorar lo que vemos y no los añadidos que nos hubieran gustado. Claro que la serie se hace corta y es difícil meter en cuatro capítulos todo el grueso del videojuego, claro que hubiera sido increíble más capítulos a este nivel, pero entrando a valorar estos cuatro episodios solo puedo decir que son una joya.

Con una música, personajes, y combates que harán las delicias de todos esta miniserie se convierte en lo mejor de pokémon creado hasta la fecha.