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Voto de Replicántropo:
2
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683
Drama
Paula vuelve a París pero no tiene dinero y se encuentra todas las puertas cerradas. En lugar de ponerse nostálgica, se sumerge en la vida parisina. (FILMAFFINITY)
17 de febrero de 2019
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
... sobre un personaje sin interés?
Desde el primer fotograma ya te das cuenta de la trampa. Tras los títulos de crédito, y todavía con la pantalla en negro, un golpetazo a una puerta y un fuerte grito intentan involucrar al espectador: "atento, que esto va en serio, no te distraigas, que soy una directora muuuuuuuuyyyyyy intensa...; voy a exponerte una historia de mujeres, desde el punto de vista femenino, y ay de ti como no entres!"
Le sigue una antipática tabarra a un enfermero... y por si quedará alguna duda, con el robo del abrigo ya te das cuenta de que no hay remedio: esta es la típica película de debutante en la dirección, que intenta disimular que tiene poco que decir apelando a una intensidad impostada y retórica.
En realidad, sólo cuenta la historia de una niñata impertinente y borde, irresponsable y egoísta, mentirosa y gandula, que por dónde pase va dejando un rastro de caos, desorden y mal rollo.
Lo más molesto de este guión perezoso y sin matices es su retorcida llamada a la empatía del público. La colección de desventuras del personaje parece interpelar al espectador: el mundo contra Paula, una víctima del deshumanizado modo de vivir actual... Menos mal que nos ahorró la inevitable alusión a lo de la globalización y eso... El problema es que todo su vía crucis por París (dónde está, que no lo vi, el retrato de la ciudad?) es retórico, vicioso, e inútil por reiterado.
Si tienes la oportunidad de verla..., déjalo, seguro que en tu vida hay otros planes.
Desde el primer fotograma ya te das cuenta de la trampa. Tras los títulos de crédito, y todavía con la pantalla en negro, un golpetazo a una puerta y un fuerte grito intentan involucrar al espectador: "atento, que esto va en serio, no te distraigas, que soy una directora muuuuuuuuyyyyyy intensa...; voy a exponerte una historia de mujeres, desde el punto de vista femenino, y ay de ti como no entres!"
Le sigue una antipática tabarra a un enfermero... y por si quedará alguna duda, con el robo del abrigo ya te das cuenta de que no hay remedio: esta es la típica película de debutante en la dirección, que intenta disimular que tiene poco que decir apelando a una intensidad impostada y retórica.
En realidad, sólo cuenta la historia de una niñata impertinente y borde, irresponsable y egoísta, mentirosa y gandula, que por dónde pase va dejando un rastro de caos, desorden y mal rollo.
Lo más molesto de este guión perezoso y sin matices es su retorcida llamada a la empatía del público. La colección de desventuras del personaje parece interpelar al espectador: el mundo contra Paula, una víctima del deshumanizado modo de vivir actual... Menos mal que nos ahorró la inevitable alusión a lo de la globalización y eso... El problema es que todo su vía crucis por París (dónde está, que no lo vi, el retrato de la ciudad?) es retórico, vicioso, e inútil por reiterado.
Si tienes la oportunidad de verla..., déjalo, seguro que en tu vida hay otros planes.