"Flipante" película de Robert Rodríguez que viene a ser una especie de homenaje al cine bizarro de los años 70 y primeros 80, en la línea de George A. Romero y John Carpenter, aunque a la que más me ha recordado es a "Posesión Infernal" (1981) de Sam Raimi por la sobreabundancia de vísceras, pupas, descomposición de carne, sangre y casquería en general. De esta manera por si hubiese alguna duda, lo que podría ser terror se vuelve sencillamente horror, es decir aversión o repugnancia pero no miedo por mucho zombi hambriento que me pongas. A mí en particular no me da asco pero no le veo la gracia y me parece grotesco.

Sea como fuere tenemos una obra que hasta sus defensores catalogan de cutre, absurda, exagerada y casposa pero que como está hecho así, entonces es brillante. ¿Perdón? Si tú vas a hacer un examen y sacas un cero a posta tienes un cero, independientemente de tu intención. Y si ruedas una tontería lo que obtienes es exactamente eso. Admito que como parodia puede verse con alguna simpatía y la imagen de la atractiva Rose McGowan con una metralleta en vez de pierna es tan friqui que merece un punto, aunque la hubiera preferido no mutilada con esas botas negras que lleva, pero con todo es un intento vacío, feo y bobo.