Dos seres a su manera cada uno perturbados por la guerra de Bosnia.

Travolta hace muy bien de radical serbio, he conocido algún fanático del este y los gestos, su forma de actuar, es muy pero que muy buena aunque la gente no haya sabido valorarla, se mete muy bien en el papel de pseudo psicópata obsesionado con la religión debido a su torturada conciencia por las atrocidades que hizo en la guerra al formar parte de un escuadrón de torturadores llamada los "escorpiones negros".

De Niro es un ex-soldado que no se siente bien con su conciencia pero no llega al nivel obsesivo del balcánico.

A los que dicen que es absurdo porque "no se matan", cuando De Niro ataca a Travolta no le mata en algunas ocasiones por suerte o por ganas de hacerle sufrir como el otro hacía sufrir a la gente en la guerra (la escena de los limones y la sal), y el ataque con el arco es fantástico.

Travolta por su parte no busca matarle de golpe sino hacerle sufrir y confesar su culpa, al fin y al cabo los últimos 18 años estuvo luchando por volver a andar y salir adelante debido al tiro en la nuca que le pegó en la guerra De Niro, y todo éste tiempo ha planeado su venganza no sólo por matar, sino descubrir si el que le disparó tiene la conciencia tan mal como él la ha tenido y no soporta verle tan "en paz", viviendo en la montaña como si nada hubiera pasado para descubrir que en el fondo son muy parecidos, pero el americano intenta pasar página disfrutando de lo bueno de la vida y beber para olvidar y no para recordar como él hace.

El final de la película está bien, De Niro tiene la sartén por el mango y decide terminar el ciclo de una vez.

"Si lo piensas nunca sabes como realmente empezó el conflicto, puedes remontarte 1000 años atrás y aún no sabrás como empezó todo". El conflicto sólo acaba cuando una de las partes busca la paz, en éste caso lanzando el Winchester por el acantilado.

Muy bueno cuando se quedan ambos sentados contemplando el horizonte, el serbio descubre que el americano que creia tan malo no lo era tanto, y al revés, llegan a comprenderse y se queda todo en punto muerto, el serbio se queda roto, tanto tiempo planeando su venganza y al final el americano resulta estar tan perturbado por la guerra como él, llegan a comprenderse y quizás perdonarse. Terminando con el chiste para intentar romper ese hielo que se genera.

Al final ambos acaban y cicatrizan, el personaje de De Niro ve a su nieto y se abre a su hijo al que no podía "ni mirar a los ojos", el personaje de Travolta por su parte vuelve a Serbia y y a la tasca donde empezó todo, la chica le dice "te han hecho daño", y él termina con un "me estoy curando".

Bonita película, que reune a dos grandes, de acción y que da que pensar, tratada injustamente por la crítica, no es una obra de arte del género pero a mi me ha gustado mucho. Sinceramente creo que hay que saber que es el sufrimiento y hacerse una idea de lo que puede ser la guerra y como puede marcar a los que la viven, sino, como pasa, la criticarás con dureza y no llegarás a comprender la película ni a disfrutar con ella. Una lástima.