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Voto de Sergio Berbel:
1
Comedia. Fantástico. Romance Un músico que lucha por abrirse camino se da cuenta de que es la única persona en el mundo capaz de recordar a los Beatles. (FILMAFFINITY)
8 de diciembre de 2020
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nadie ama las canciones de The Beatles más que yo, ni les tiene más respeto reverencial. A mí no me cabe duda de que estamos ante el grupo más importante de la historia de la música por los siglos de los siglos. Pero Danny Boyle no lo respeta cuando perpetra, más que rueda, una cinta infame e impresentable titulada “Yesterday”, que nunca debió existir a pesar de que revolotea a lo largo de todo su metraje alrededor de la discografía de los de Liverpool.

La premisa argumental es una estupidez. El desarrollo está telegrafiado ab initio a través de la fórmula palomitera repugnante al uso. El final es ridículo y da risa de lo estúpido que resulta su happy end mascado y digerido, infame. Su comedia romántica no funciona nunca, ni como comedia ni como romanticismo. Todo es un pastiche de diez mil películas ya mil veces vistas y produce vergüenza ajena en general e ira destructiva en los que idolatramos a The Beatles, que no son respetados en este esperpento cinematográfico.

Tan solo el planteamiento inicial argumental ya es increíble, resulta finalmente inexplicado en la propia cinta y no deja de ser ridículo: a raíz de un apagón planetario durante 12 segundos sin electricidad en todo el globo terráqueo, es como si The Beatles nunca hubieran existido (de paso la CocaCola y Harry Potter tampoco) y nadie conoce sus canciones. Es imposible un mundo sin The Beatles (en eso le tengo que dar toda la razón al infame guionista Richard Curtis, un auténtico terrorista con la comedia romántica como arma de destrucción masiva) y hay un joven músico fracasado que resulta ser el único que conoce sus canciones. Obviamente, va a utilizar la oportunidad para hacerse pasar por el compositor de las mismas y saltar a la fama a nivel mundial.

Con semejante premisa, lo demás se veía venir lamentable. Pero te quedas corto en las previsiones, es aún peor de lo que esperas. El Danny Boyle que alguna vez nos deslumbró (o quizás no tanto si te paras a pensarlo) ya no existe, está enterrado por las ansias de taquilla, dejó de respirar como artista, es apenas la ruina de lo que alguna vez pudo ser.

“Yesterday” es una película mala de solemnidad que los que amamos a The Beatles no podemos perdonar. Nos hemos quedado con tu cara, Boyle.
Sergio Berbel
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